El grupo municipal socialista hizo ayer balance del último ejercicio. Su portavoz, Luis Salaya, dedicó parte de su intervención al turismo y al descenso que se produce en el número de viajeros según los datos estadísticos del INE. «Lejos de la realidad idílica que presenta la alcaldesa, la verdad es que Cáceres pierde fuelle», aseguró Salaya, que recordó que pese a los datos que pueda ofrecer ahora el gobierno local para contrarrestar los del INE, los operadores de turismo se guiarán por la información del instituto de estadística y «no por los datos que el gobierno elabore a medida».

El portavoz socialista insistió en que la información del INE tiene que «hacernos recapacitar sobre qué se está haciendo» y subrayó que el gobierno local no dota al servicio de Turismo del suficiente número de trabajadores y presupuesto, insistiendo en que cuenta con menos personal que otros ayuntamientos con menos población. «Tenemos buenos profesionales en el sector, pero el ayuntamiento lo está lastrando y hace que Cáceres se quede atrás», aseguró el portavoz del PSOE.

Salaya se apoyó ayer en la encuesta del INE. En su estudio de ocupación hotelera (en el apartado de viajeros y pernoctaciones en puntos turísticos), el instituto cuantifica en 267.867 los visitantes que han estado en Cáceres en el año comprendido entre diciembre de 2016 y noviembre de 2017. Son 5.300 menos que los registrados en el mismo intervalo del periodo anual anterior. También bajan las pernoctaciones en 12.300. Según esta información del INE, es el turismo nacional el que baja, mientras que el internacional, que tiene menos peso sobre el global, sube en visitantes y pernoctaciones.

PERNOCTAR / En su balance anual, que ofreció el pasado miércoles, Nevado aseguró que el número de visitantes «ha aumentado según los primeros análisis del servicio de Turismo». Y añadió que el INE no tiene acceso a los datos de los visitantes que pasan por la ciudad y no pernoctan. La alcaldesa insistió en que hay que distinguir entre pernoctaciones y turistas que duermen en alojamientos, que son los que cuantifica el INE, y los visitantes que pasan por la ciudad y cuyos datos se registran en la oficina de turismo.

Salaya dio ayer más valor a las pernoctaciones y a los datos de los alojamientos que a los recogidos en oficinas de turismo o centros municipales, «un mismo turista que entre en un museo y luego en la oficina de turismo puede estar contabilizado dos veces». Reiteró que uno de los problemas es que «tenemos muchos visitantes en comparación con los turistas -- los que pernoctan-, necesitamos más noches de estancia».

En cuanto a la relación entre los partidos, el portavoz socialista aseguró que 2017 ha sido un año marcado «por la nueva coalición de gobierno de facto en el ayuntamiento», una unión formada por PP y Ciudadanos, partido que «gobierna con Elena Nevado con efectos nefastos para la ciudad».

Relacionado con lo anterior, Salaya afirmó que 2017 «no ha sido un año fácil» porque «la tensión política nacional se ha trasladado a todos los niveles», añadiendo que «la buena relación entre el partido de Albert Rivera y el PP se ha trasladado al ayuntamiento». PP y Cs alcanzaron en 2017 un nuevo acuerdo que permitió aprobar los presupuestos de 2018.

Aseguró que el acercamiento entre Cs y PP en el último año y medio ha impedido que «la oposición pueda trabajar de forma constructiva en su conjunto como al principio de la legislatura».