San Fernando aguanta el temido tirón de la crisis, cuya sombra se diluye a medida que avanzan los días de feria, en base a una continua afluencia de público al recinto del antiguo campo de aviación y la buena entrada que registran las casetas. La policía calcula que en las jornadas del jueves y el viernes pasaron por allí en torno a 40.000 personas, una cifra superior a lo esperado, similar a los valores recogidos en años anteriores e inferior a la que se esperaba en la jornada de anoche, sábado, y también en la de hoy. La previsión de ayer es que ambas jornadas fueran masivas. La noche del sábado, porque siempre es la que más público reune, y en el caso del domingo, debido a la jornada festiva de mañana lunes.

La concejala de Dinamización, María José Casado destaca la buena afluencia de público que registra el recinto y además, que la programación de la Feria de San Fernando la está consolidando como "una seria alternativa de ocio", sobre todo, "por la apuesta que las casetas están haciendo este año por ofrecer música gratuita en directo", valoró, en referencia a los conciertos que algunas de ellas están programando. Casado destacó además el control efectivo que la policía local está realizando para evitar el botellón en las calles principales de las casetas, uno de los cambios introducidos este año para mejorar la seguridad, y valoró la ausencia de incidentes graves en los primeros días de fiestas.

Este dato lo corroboraron también ayer desde Cruz Roja, que mantiene un operativo con 30 voluntarios y cinco ambulancias en el recinto. En las ferias del año pasado atendieron más de 200 emergencias en los seis días de fiestas (34 por término medio), mientras que entre las noches del jueves y el viernes de este año han atendido un total de 43 (17 el jueves y 27 el viernes), todas ellas de caracter leve. Al cierre de esta edición, los servicios sanitarios confirmaron que tres personas habían sido trasladadas por cortes, mientras que otro hombre atendido en la zona de casetas por una unidad medicalizada.