La policía local se personó hasta seis veces en el domicilio familiar que le facilitó la Guardia Civil para tratar de comunicar la muerte de la joven cacereña Merche Montes en un accidente de tráfico en Olivenza el sábado, que no pudo hacerse hasta doce horas después del fallecimiento.

El primer intento fue poco antes de las 23.00 --la joven murió a las 17.45 y la Guardia Civil contactó con la policía local a las 22.45--, otro a las 23.15 y a la 1.40. Nadie respondió al portero automático. Volvieron por la mañana: a las 7.10, 8.15 y a las 9.00. A esta hora, al abrir el portal un vecino, los agentes accedieron al piso, donde ya sí les abrió una mujer de edad avanzada y con problemas de audición.

Esa es la explicación que ha dado la policía local sobre lo ocurrido al alcalde, José María Saponi, quien exculpó ayer de toda responsabilidad a los agentes en la tardanza. Saponi dio a conocer durante el pleno de la corporación, interpelado por el PSOE sobre esta cuestión en el turno de ruegos y preguntas, del informe que a petición suya había elaborado la jefatura del cuerpo municipal sobre la actuación en este caso y ante la denuncia de presunta negligencia que hizo la familia a través de EL PERIODICO EXTREMADURA.

COMPETENCIAS En el informe se detalla que la Guardia Civil solo facilitó este domicilio y que la Policía Nacional también conocía la situación, pero que sin embargo los únicos que actuaron fueron los agentes municipales, siendo en realidad competencia de la Nacional. "La policía cumplió con su obligación y solo hubo un cúmulo de problemas intermedios que impidió la rápida comunicación a la familia, pero que en ningún caso es imputable a la negligencia de la policía local", concluyó el alcalde.

Un tío de la joven denunció el martes que cuando fueron a pedir explicaciones a la policía local, se les dijo que no se pudo comunicar antes por la falta de patrullas para realizar el servicio.

Por otro lado, entre los temas abordados en el pleno, destacó la paralización de la creación de una oficina de congresos, que se dejó sobre la mesa por falta de los informes técnicos de viabilidad, un hecho que el PSOE criticó porque hubiera sido nula.