La nueva presa prevista en la cuenca del río Almonte se ha convertido en la primera reivindicación del alcalde, José María Saponi, ante el ejecutivo de Zapatero. Pero el tono de su reclamación no es el mismo que el de abril, y de las dudas que entonces tenía sobre su construcción y el temor a que su ejecución se ralentizara ha pasado a asegurar que espera que no haya problemas. Saponi habló ayer de la presa en declaraciones a RNE. "Pienso que no va a haber ningún tipo de problemas", afirmó, para después recordar que todavía está esperando que la ministra de Medio Ambiente, Cristina Narbona, conteste a la carta que le remitió en junio y en la que pedía que la obra se licitase lo antes posible.

Pero para que se inicie la obra queda un largo proceso, y el primer paso es que se publique en el BOE el anuncio de la puesta a información pública del estudio de impacto ambiental de la nueva presa, un anuncio que "está pendiente de publicación, de momento no ha salido", aseguraron ayer fuentes de la Confederación Hidrográfica del Tajo.

El presidente de la confederación, José María Macías, que accedió al cargo el pasado mes de abril, aseguró en junio, en una reunión con la delegada del Gobierno, que se había encontrado con que la mayoría de las obras previstas en el Plan Hidrológico Nacional para Cáceres estaban sin ejecutar, y en julio, tras reunirse con representantes de la diputación, confió en que el estudio de impacto ambiental estuviese publicado en septiembre.

EL HORIZONTE DEL 2012 La elección del Almonte para construir la presa cuenta con la oposición de colectivos, que han constituido una plataforma y que temen por el daño que se causará al único ecosistema fluvial extremeño que aún no se ha alterado.

El rechazo de la plataforma contrasta con el deseo del gobierno municipal de que la ejecución de la presa se agilice. Saponi volvió a insistir ayer en que "actualmente no hay problema", pero en los últimos meses ha repetido una de las consideraciones que se recogen en los estudios previos del nuevo abastecimiento, en los que se apunta la conveniencia de contar con esta presa antes del 2012.