La fortuna no entiende de números raros. El 87711, una cifra poco atractiva, dejó ayer en Cáceres 20 millones de euros del segundo premio del sorteo de lotería de El Niño. Pero la cantidad pudo ser bastante superior, de 50 millones, ya que todas las series se pusieron a la venta en la administración número 11, que está en el centro comercial Ruta de la Plata. "Se devolvieron treinta series", que equivalen a 30 millones de euros, indicó ayer Marian Arroyo, quien regenta la administración junto a su hermana.

En la administración se vendieron 20 series, 200 décimos, y todo "en ventanilla", explicó Dolores Arroyo, por lo que estimó que el premio estará muy repartido. Añadió que es difícil que se hayan hecho participaciones por parte de peñas, establecimientos o colectivos, "porque se llevan grandes cantidades y lo sabes".

Los otros 300 décimos que estuvieron a la venta en la administración, pero que no se adquirieron, se devolvieron la tarde del pasado viernes, "quizás, de todos los números que vinieron completos, ha sido del único que se ha devuelto", añadió Marian Arroyo. "En números como éste es normal que haya devolución porque se buscan cifras bonitas, y te dicen que de ese número no, que es raro, y no lo piden o incluso hasta lo rechazan si tú se lo das", comentó la lotera.

El premio que ayer tocó en Cáceres es "el más importante de este sorteo que se da en la ciudad" desde que en el año 1908 se celebró la primera edición de El Niño, afirmó Julia Sanguino, delegada comercial en Cáceres de Loterías y Apuestas, que ayer se desplazó a la administración.

Cáceres no ha sido afortunada en los premios de lotería, sobre todo en el extraordinario de Navidad. Angela Hoyos, madre de las dos hermanas que regentan la administración, destacó que con el premio dado ayer se desmuestra que en Cáceres también puede tocar la lotería y que "no hace falta comprarla fuera".

CLIENTE A CLIENTE "Este es un premio que está muy repartido, cliente a cliente, que se han podido llevar hasta tres, dos o un décimo", comentó Marian Arroyo. Su hermana recordó que "el perfil de la clientela" de la administración es muy variado por donde está la oficina, "es gente de Cáceres y de otras poblaciones próximas", matizó.

A pesar de que la administración está dentro del centro comercial, trabajadores de establecimientos abiertos ayer (negocios de hostelería, comida rápida o el cine) aseguraban que no estaban entre los afortunados que compraron el 87711.