La sexta fase de las obras de acceso al santuario de la Montaña, la que va desde la última curva de San Marquino hasta Fuente Concejo, estarán listas el mes que viene, según confirmó a este diario el concejal de Infraestructuras y Desarrollo Local, Miguel López. La obra pasa por la mejora del firme, la sustitución de las tuberías de abastecimiento de agua (son de fundición gris y se pondrán de fundición ductil), además de la sustitución de las acometidas domiciliarias, las bocas de riego y la colocación de hidrantes contra incendios.

La obra también contempla la construcción de una nueva red de saneamiento, de alumbrado público, telefonía y gas, se va a demoler el acerado antiguo, se construirá uno nuevo con barreras arquitectónicas. Aunque la actuación tiene un plazo de ejecución de cuatro meses, la previsión municipal es que en diciembre esté acabada ya que se trata de una obra del Plan E, cifrada en 150.000 euros y adjudicada a la empresa Construcciones Hidráulicas y Viales.

El proyecto de mejora de accesos al santuario de la Montaña lo puso en marcha José María Saponi, al frente de la alcaldía con el Partido Popular. Las obras comenzaron en el año 2000 en el tramo del Amparo y la que actualmente se desarrolla es la sexta. Solo queda la séptima y última fase, la de mayor cuantía. Los cálculos cuando el PP gobernaban la situaban en un millón de euros. Miguel López dijo ayer que esta fase "ni está presupuestada ni se la espera".

LOS DETALLES Esta séptima fase prevé la construcción de una carretera detrás del santuario, para lo que habrá que expropiar terrenos, puesto que éstos son de titularidad privada. Asimismo, deberá realizarse un estudio de impacto ambiental al estar enclavados en la Sierra de la Mosca. La intención municipal era realizar un aparcamiento para autobuses y un mirador que dominaría la penillanura trujillano-cacereña (justo en el lugar desde donde Alfonso XIII divisó la ciudad cuando acudió a Cáceres en los años 20 para inaugurar el ferrocarril).