Sindicatos y ayuntamiento coincidieron ayer en afirmar que el Gobierno debe dotar a Cáceres de más efectivos de Policía Nacional después del incidente ocurrido el domingo con tres agentes de la policía local que resultaron agredidos por un presunto ladrón después de una persecución desde la calle San Pedro de Alcántara hasta Aldea Moret. Fue en este último barrio donde el detenido arrebató presuntamente el arma a uno de los policías y apretó el gatillo. El agente no sufrió daños porque la pistola no estaba cargada.
Los hechos, que han terminado con el ingreso en prisión del detenido, han vuelto a poner de actualidad un antiguo debate que siempre ha existido en Cáceres en torno al posible exceso de funciones que tienen los agentes de la policía local. En este sentido, Tomás Simón Ramajo, presidente provincial del sector de Administración Local de CSI-CSIF, consideró ayer una "evidencia" la necesidad de que el Gobierno aumente la dotación policial. "No hay efectivos y los policías locales se ven irremisiblemente abocados a realizar funciones que no son suyas".
Simón Ramajo estimó que la policía local está para colaborar con la Nacional, "y no al contrario, que es lo que está sucediendo hasta ahora". CSI-CSIF, el sindicato mayoritario en el cuerpo de la policía local, también recordó la necesidad de que la jefatura cuente con un armero porque "hay un problema en el material y custodia de las armas", dijeron fuentes del sindicato, que también se refirieron a la existencia de sentencias condenatorias a policías locales durante el desarrollo de su trabajo.
Por su parte, el concejal de Seguridad Ciudadana, Santos Parra, volvió a reclamar más Policía Nacional. "No quiero mezclar este asunto con cuestiones políticas, pero soy de Cáceres y me interesa la seguridad de los ciudadanos de Cáceres. Y si es necesario que haya más dotaciones de la Policía Nacional que las reclamen. Vamos a seguir apoyándolos, pero necesitamos más del apoyo del Cuerpo Nacional de Policía que ellos de nosotros. Deben invertirse los términos".
Parra indicó asimismo la necesidad de que la jefatura local tenga un armero y de que incluso se aumente la plantilla, dos aspectos que reclamará para los próximos presupuestos municipales. El edil también se refirió a una reciente sentencia que condena al pago de una multa a un oficial y a dos agentes mientras realizaban tareas profesionales.
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