Las quejas vecinales se sucedían porque por Santiago no se podía dar un paso. El ayuntamiento ha querido poner freno a la situación y su Concejalía de Infraestructuras lidera una actuación para librar de socavones la plaza de Santiago y todo su perímetro. De ocho de la mañana a tres de la tarde, de lunes a viernes, la brigada que dirige el encargado José Antonio Rubio, trabaja mortero en mano para dejar como una patena el pavimento de una de las zonas más emblemáticas del recinto intramuros de Cáceres.

Junto a Rubio trabajan los oficiales de primera José Vega, David Amado y José Manuel Salgado, además de los peones Eugenio Carlos Mendoza y Jesús Manuel Rivas. La inversión, que efectúa el ayuntamiento con medios propios, está cifrada en algo más de 70.000 euros. Las obras comenzaron el 10 de agosto. Febrero es el mes que se prevé como fecha tope para su finalización.

Miguel López explicó ayer que el deterioro de Santiago se debía a dos motivos: el tráfico rodado y la rehabilitación de viviendas en la zona, que obligaban al paso de camiones y material. Ello forzaba al ayuntamiento a reponer los cantos de forma constante, así que ahora se ha apostado por "una actuación integral, genérica y más consistente en el tiempo", apuntó el edil.

José Antonio Rubio explicó que se está utilizando mortero de cemento para que la resistencia sea mayor, además se han construido unas canaletas para que el agua discurra de forma lógica y no cause humedades en los edificios. Los trabajos se desarrollan en Santiago, pero también en Godoy y calles adyacentes: el acceso a Caleros o Picadero entre ellas. "Es una brigada muy profesional", concluyó López.