«Estamos en 1,28 hijos por familia en los datos de 2015, son las únicas que garantizan el relevo de población, para el que son necesarios 2,1 hijos por familia». En estos términos se expresa Anfares, asociación cacereña de familias numerosas sobre la necesidad de proteger los núcleos familiares con tres o más hijos. Basan su argumento en que una familia con tres o más hijos «aporta más población activa y contribuye más que ningún otro a construir el futuro».
Aparte del factor laboral, Anfares también hace mención a un condicionante social. Según los datos que maneja el colectivo, «los miembros de la familia numerosa nacidos en Cáceres, con progenitores de Cáceres, son los ciudadanos con más arraigo y que más tiempo permanecen en la ciudad, generalmente y como mínimo hasta la mayoría de edad o la enseñanza obligatoria».
Anfares pone de relieve el «momento de incertidumbre» en lo que se refiere al relevo generacional y hace mención a la caída de la tasa de natalidad de la población extremeña, una «situación que se agrava en la provincia de Cáceres». Según datos de 2015, la capital cacereña registró 95.617 habitantes (45.947 hombres y 49.670 mujeres).
En ese sentido, el colectivo que aglutina a alrededor de doscientas familias numerosas de la provincia lamenta que este descenso tiene «repercusión» a nivel económico, ya que, según exponen «la financiación en una ciudad que pertenece a una provincia con poca por no decir nula industria, procede de nuestros impuestos, que es proporcional a la financiación que tanto el Estado como Europa hacen por habitante, es decir, a menos habitantes, menos financiación de nuestros servicios».
