El ayuntamiento intensificará la vigilancia en los soportales de la plaza Mayor tras el incremento de los grafitis denunciado por negocios de la zona a raíz del vallado por las obras de remodelación del recinto histórico. Así lo anunció ayer Carlos Jurado, concejal de Seguridad Ciudadana, que reconoció las dificultades que existen para poder detener a los autores de las pintadas ya que, dijo, "es necesario pillarlos in fraganti ".

El edil aseguró que se trata de "actos vandálicos" y rechazó que sus responsables puedan ser llamados "grafiteros" porque lo que éstos hacen "sí tiene un valor artístico". Jurado lamentó que esta situación siga repitiéndose y se mostró pesimista en que pueda erradicarse "porque es un mal que afecta a muchas ciudades". En este sentido, apuntó que "en ningún sitio lo han conseguido" y dijo que "se puede controlar, aunque cuando detienen a alguien en una zona está tranquila durante un tiempo hasta que sale otro".

Jurado defendió también que las pintadas "no son un problema de ámbito estrictamente policial" sino también de carácter educativo. En este sentido, planteó la idea de llevar a cabo campañas de concienciación en los colegios para que los jóvenes sepan que "los daños al patrimonio afectan también a la ciudad en la que viven".

CATALOGO Para la localización de los autores de las pintadas, Jurado explicó que la policía local dispone de un catálogo de "firmas" que sirve para que cuando son detenidos puedan ser identificados y llevados ante el juez. "Hemos tenido casos de algunos con hasta 300 firmas", añadió el concejal. Este extremo coincide con la denuncia de los establecimientos de la plaza Mayor, que aseguran que los registros de las pintadas se repiten.

Las facilidades para que los vándalos puedan campar a sus anchas viene motivado por las lonas opacas de color negro que se han colocado en todo el perímetro de los soportales. Ni la policía ni los peatones pueden ver lo que está pasando dentro a no ser que se recorran todo el vallado. Esta situación aumenta la vulnerabilidad y desprotección de los negocios de la zona, especialmente durante la madrugada y fines de semana, cuando más pintadas se registran.