El polígono industrial de Charca Musia se ha convertido en un auténtico vertedero. Entre las naves industriales se levantan montones de basura. Se pueden encontrar desde escombros de obra a sofás viejos. La situación se ha hecho insostenible para los empresarios de la zona. "Esto parece un estercolero, hay basura a cada paso", es una de las frases más repetidas en el polígono.

No hace falta adentrarse mucho para comprobar la situación que se vive en la zona. Junto a la carretera ya se divisan los primeros montones de escombros. Los contenedores se encuentran vacíos. "El servicio de recogida de basura ha pasado hace una hora", explica el responsable de Pinturas Mayo. Sin embargo, el suelo está lleno de desperdicios y no precisamente pequeños. "Nosotros estamos al día en cuanto a pago de impuestos, pero en cuanto a limpieza estamos desfasados", denuncia el citado empresario, que añade: "Esto lleva pasando mucho tiempo. La gente viene desde Cáceres a tirar los escombros a Charca Musia".

La situación se agrava al llegar a la zona de la charca. A los montones de basura desperdigados por el suelo se añade el mal estado del asfalto y la cantidad desmesurada de polvo que se respira en el ambiente. Cualquier persona con una afección respiratoria tendría dificultades para pasar un par de horas en el lugar. "Es un cúmulo de cosas: pasto, polvo, piedras...", asegura Gonzalo Guerra, propietario de un taller mecánico situado frente a la charca. Gonzalo relata como, incluso, "hay gente que es reticente a venir al taller por el mal estado de las carreteras". El mecánico añade una nueva denuncia. "Las naves tienen los papeles en regla. Pero se dice que el polígono como tal, no está legalizado". Una situación cuanto menos preocupante.

Sin embargo, los empresarios nunca se han unido para presentar una queja conjunta al ayuntamiento. "Yo he llamado un par de veces al servicio de obras y no han hecho nada", se excusa uno. Para otros el problema es "la falta de unidad". Hace años se intentó crear una asociación para denunciar la situación ante las autoridades, pero el proyecto no llegó a cristalizar. Ahora todos coinciden en la necesidad de encontrar una solución.