El pleno de la corporación municipal aprobó ayer que Autobuses Urbanos del Sur (Busursa), la compañía que ha gestionado el transporte público de Cáceres durante los últimos 21 años, ceda el contrato a Subus, acuerdo que tendrá efectos desde su firma en escritura pública. No era seguro que esta autorización se fuese a dar ayer, pero el gobierno insistió en su urgencia por la grave situación económica en la que se encuentra Busursa, "estamos en el tiempo límite antes de que se vea intervenida por decisión judicial", afirmó el portavoz del gobierno, Lorenzo de la Calle. "A lo mejor entra en una situación en la que no podríamos rescatar la concesión", añadió la alcaldesa, Carmen Heras.

Estos argumentos convencieron al PP, que en un principio había propuesto aplazar unos días la decisión porque la documentación se entregó el pasado miércoles. Busursa es una empresa del grupo del expresidente de la CEOE, Gerardo Díaz Ferrán, aunque en los últimos meses la que se ha presentado como propietaria ante el ayuntamiento es la sociedad Posibilitum Bussines.

El PP reclamó al gobierno local que en los próximos días le dé la información sobre el calendario para el pago de la deuda que el ayuntamiento mantiene con Busursa, está en torno a los ocho millones de euros, y que se debe abonar con independencia del acuerdo de cesión entre Busursa y Subus, que se encargará de la gestión de los autobuses.

Representantes del comité de empresa y de la compañía asistieron al pleno. "Subus tiene solvencia y puede ser la solución", indicaron a la salida del salón.

PLENO TENSO El de ayer fue un pleno tenso en algunas intervenciones. La alcaldesa llegó a llamar al concejal de IU, Santiago Pavón, "misógino" por sus alusiones a ella y a Elena Nevado, portavoz del PP, mientras que Pavón abandonó el pleno tras denegarsele el turno. "Sois unos fascistas y me voy, PP y PSOE son la misma porquería", afirmó antes de dejar el salón.