El ayuntamiento sacó ayer a licitación la concesión de los diez locales de la primera planta del mercado de abastos que se tienen que destinar a usos de restauración y hostelería. Es el tercer intento en un año y medio para que se puedan ocupar estos puestos y reactivar el edificio de la ronda del Carmen, que en su planta baja mantiene los locales destinados a alimentación que están ocupados, mientras que en la primera están los de restauración que llevan más de año y medio vacíos.

Las dos convocatorias anteriores quedaron desiertas. El principal cambio que se introduce ahora es que cada uno de los diez puestos se saca a concesión de manera individual con un canon o alquiler que está entre los 629 euros/año del más pequeño y los 1.377 del más grande. En los dos procesos anteriores salían de manera conjunta con un precio anual de 19.040 euros en el primer concurso y de 8.538 en el segundo.

En esta nueva licitación cambia el modelo de gestión. En las dos primeras una única empresa tenía la concesión de los diez locales, mientras que en la tercera puede haber diez adjudicatarios. El canon a pagar al ayuntamiento es el mismo que en el segundo concurso. Son 8.538 euros que ahora se distribuyen entre los diez puestos o locales.

El grupo municipal de CACeresTú ya planteó en el pleno de junio de 2016 que cada puesto se sacase a licitación de manera individual para favorecer que autónomos y pequeñas empresas tuviesen más facilidades para concurrir. El grupo municipal socialista también abogó por sacar cada local de forma individual porque la oferta de una gestión única no atrajo a licitadores en los dos primeros concursos.

«Quedó desierto y ante estas circunstancias y para que puedan ponerse en explotación se han variado los pliegos para que pueda salir como adjudicación individual y no global», se explicó ayer desde el gobierno local (PP).

INFORME DESFAVORABLE / La reforma del mercado de abastos y la potenciación de su uso es un proyecto que cabalga entre dos legislaturas. En la anterior se abordó la modificación del plan general de urbanismo para reformar el edificio y se adjudicaron las obras. En la actual se aprobó un reglamento de uso y se ha sacado a licitación la explotación. El coste de las obras aún colea. El pleno del ayuntamiento aprobó en diciembre un reconocimiento extrajudicial de crédito para pagar un reformado de 180.277 euros, gasto que tuvo informe desfavorable del servicio de Intervención municipal por ejecutarse sin contar con la autorización del órgano competente.