No hay noticias desde el 8 de mayo del 2003. La tercera fase de la restauración de Santa María, el monumento más emblemático de la parte antigua cacereña, está paralizada y tampoco se conocen las razones concretas. En la primavera del 2003, la Comisión Mixta Iglesia-Estado aprobó el proyecto y un presupuesto de 952.820 euros por parte del Ministerio de Fomento para esta fase, que permitiría seguir luchando contra el mal de la piedra que afecta a buena parte de los muros, rehabilitar el delicado pavimento y otras mejoras. Solo faltaba la revisión definitiva, pero pasaron los años y no ha trascendido desde entonces ninguna otra información.

EL PERIODICO se ha puesto en contacto con el dean del Cabildo Catedral, José Antonio Fuentes, quien ha confirmado que a día de hoy sigue sin haber novedades al respecto. Por tanto, la restauración del templo lleva veinte meses interrumpida, concretamente desde que finalizaron las obras de la segunda fase, en enero del 2005. El mayor problema que sufre la concatedral es el denominado mal de la piedra, una enfermedad del granito que amenaza con reducirlo a arcilla, y que todavía aqueja a amplias zonas del exterior y del interior pese a las reformas previas.

El proyecto de la tercera fase, redactado por los arquitectos cacereños Luis González y Justo García, incluye una serie de trabajos a realizar en un plazo aproximado de dos años. En primer lugar, la rehabilitación de los exteriores del ábside, en continuo deterioro. Pero también todo el muro y portada oeste, es decir, la fachada que mira hacia la Diputación Provincial. Destaca la consolidación del pavimento, una obra muy necesaria pero complicada al mismo tiempo ya que cubre numerosos enterramientos y laudes de obispos, nobles y otros personajes. Además, incluiría la restauración de la piedra en algunas zonas interiores, donde apenas se han efectuado reformas salvo algunas actuaciones en el mobiliario.

OBRAS DESDE EL 2001 La recuperación de la concatedral cacereña se inició en el 2001. La primera fase permitió rehabilitar la torre, muy afectada por el mal de la piedra. La segunda hizo posible la mejora de las cubiertas y la portada norte, también bastante dañada, con un desembolso de 279.000 euros financiados por el Ministerio de Cultura. De momento no hay presupuesto para seguir adelante. Este diario ha podido constatar que parte de los proyectos de Fomento se derivaron a Vivienda al comenzar la presente legislatura, pero se desconoce si es el caso de Santa María y cuándo podría resolverse definitivamente.