Una mezcla de lenguas y culturas se reúnen en las instalaciones de la Asociación Católica de Servicios a la Juventud Femenina (ACISJF). Se clausura un curso de cocina en el que han participado 25 mujeres de distintas nacionalidades. Al cierre de esta iniciativa, enmarcada en el Proyecto de Inserción Laboral para Mujeres Inmigrantes y fruto del convenio firmado entre la asociación y el Instituto de Asuntos Sociales (IMAS) y en el que ha colaborado la Universidad Popular, asiste el alcalde en funciones, Joaquín Rumbo.

El objetivo del curso es conseguir la integración total de estas mujeres en la ciudad. Cada una de las participantes ha preparado un plato típico de la gastronomía de su país. Cristina Ceballos ha cocinado piqué macho , un plato tradicional de su Bolivia natal. Mientras presenta orgullosa su obra recuerda como llegó a España. "Vine hace apenas un año con mi familia, buscando una vida mejor". Cristina ha tenido suerte y trabaja como modista, "lo mismo que hacía en mi país", señala. En la mesa de enfrente a la de Cristina está Khadidja, una argelina afincada en España desde hace nueve años. Explica sonriente el proceso de preparación del cordero con ciruela y almendras típico del país que la vió nacer. Sin embargo, su semblante cambia cuando se le pregunta como llegó a España. "De eso no hablo", dice. Parece una herida difícil de cicatrizar.