La celebración del día de la diputación, con desfile de la corporación provincial incluido, se vio ayer marcada por el conflicto de los bomberos. A él se refirió el presidente de la institución, Juan Andrés Tovar, para reconocer que "es inviable" atender sus pretensiones económicas.

Señaló, en este sentido, que no será posible que pasen de la categoría D a la C, "porque nuestra asesoría jurídica ya nos ha indicado que eso es ilegal", así como que tampoco se puede llegar a la subida salarial del 30 por ciento que piden, "pues no estamos en condiciones económicas para hacerlo. Podemos hacer un esfuerzo importante, pero el porcentaje que piden está lejos de lo que nosotros podemos ofrecer".

Reconocida esta realidad, y ante las medidas de presión que el colectivo de bomberos viene ejerciendo en demanda de mejoras laborales y económicas, Tovar se mostró "respetuoso" con sus decisiones, pero manifestó no entender que se adopten medidas de fuerza durante una negociación. "Cuando se está negociando las partes se dedican a negociar, y si al final del proceso no hay acuerdo es el momento, si se considera conveniente, de adoptar otras posturas".

DISCREPANCIAS Ante este conflicto, el presidente de la diputación aseguró que por su parte "no vamos a caer en la trampa de radicalizarnos, nosotros vamos a seguir negociando con los representantes de todos los trabajadores de la casa y haciendo un esfuerzo para llegar a acuerdos, entendiendo todos los trabajadores que nuestros recursos tienen que estar destinados a ellos, pero también a los servicios de los ciudadanos, y tenemos que guardar un equilibrio entre una cosa y otra".

Tovar insistió en su apreciación de que no es lógico que durante la negociación de un acuerdo haya grupos o representantes sindicales que protagonicen encierros y manifestaciones. "Bajo presiones --dijo-- es mucho más difícil llegar a un acuerdo", y por ello invitó a los bomberos a serenarse y a esperar a que finalice el proceso de negociación, "como están haciendo el resto de los trabajadores".

Por su parte, los representantes sindicales de los bomberos insistieron en que la propuesta que les han hecho "es irrisoria". Opinan que si para la institución "con un punto más de peligrosidad ya dan a los bomberos lo que se merecen, es porque nos tienen en muy poca estima".

Y respecto a la advertencia del diputado José Félix Olivenza, en el sentido de que si van a la huelga de hambre y esto afecta al servicio se contratarían empresas privadas, cuestionaron esta postura, "pues posiblemente les costará más de lo que nosotros pedimos y sin saber su resultado".