Jesús Cifuentes, solista de Celtas Cortos, no teme la pelona que, pasadas las cinco de la madrugada de ayer, está cayendo sobre el recinto hípico. Fernando Alonso calienta motores en Australia. Extremúsika 2006 está a punto de pasar a la historia como el festival del éxito por su poder de convocatoria, que refrenda a esa hora el llenazo del recinto hípico tras más de 17 horas de música ininterrumpidas en la segunda y última jornada del sábado.

En el exterior, el botellón bate récords de asistencia. No hace falta tener entrada para demostrar que se han superado todas las previsiones. La ausencia de incidentes y el buen tiempo también han ayudado. La última noche de Extremúsika 2006 sabe a victoria. "Hemos trabajado mucho. Aunque se nota el cansancio, empiezo a echarlo ya de menos", asegura en el backstage la locutora de Cadena 100 Cáceres, Carmen Gómez, metida en la promoción del festival desde hace meses. Angel Romero, máximo responsable de Extremúsika, se ha quedado sin voz, aunque sigue demostrando buen humor con el bolígrafo para comunicarse.

Hasta la bandera

El ambiente desde el escenario mientras suenan Celtas Cortos impresiona. Todos coinciden en que el hípico nunca ha registrado un lleno parecido, algo que ya sabe el calvo de la banda vallisoletana antes de salir a escena: "Es un motivo de celebración enorme. Espero que a la gente aún le quede energía", afirma Cifuentes en los camerinos a las tres de la madrugada.

Vestido con camiseta de básket y pantalón de chándal, habla en el escenario de la trama de corrupción en Marbella y pide a los miles de jóvenes, que han escuchado Tranquilo, majete , "que se levanten cada mañana con espíritu combativo". Héctor y Mili, de la banda cacereña Los Niños de los Ojos Rojos, afinan detrás sus instrumentos antes de salir al escenario como invitados de Jesús Cifuentes y compañía.

Pero antes de la traca final, Despistaos, otro de los grupos que sigue creciendo al amparo de A Vallekas Producciones, ha gustado con un sonido más rockero. Dani, el solista, ha saltado más que nunca después de haber vivido también el festival como un espectador más. Después, los alemanes de Kreator han dado un ejemplo de música metálica pura y la banda sevillana Reincidentes ha removido conciencias con sus letras reivindicativas por una sociedad mejor. Lichis, de la Cabra Mecánica, y Miguel Angel Rodríguez, de Mojinos Escozíos, que han actuado antes de medianoche, ya se han marchado dejando un buen sabor de boca a sus seguidores.

La puerta del camerino de Barón Rojo está cerrada a cal y canto. Charo Calvo y Laura Zahínos, de Canal Extremadura Radio, han conseguido entrar, micrófono en mano, para que saluden en directo en el estreno de la radio autonómica en un festival. El paso de los años no es obstáculo para que la mítica banda madrileña ofrezca luego un sonido heavy-rock de antiguo vinilo.

En la carpa para invitados al festival, situada junto a uno de los escenarios, está Víctor Vehemencia, de la productora cacereña Mosquito. No ha aparecido ningún concejal cacereño, a excepción de Santos Parra y Joaquín Rumbo, que lo hicieron en la noche del viernes, y Manuel Rodríguez Cancho, el sábado por la tarde. Florencio Bañeza, director de Cadena 100, no ha fallado ninguna.

Extremúsika 2006 ha terminado y el reguero de jóvenes de vuelta a casa se hace notar sobremanera el domingo a mediodía en la salida del ferial. El festival ha incrementado los ingresos en hoteles, bares y supermercados, donde las existencias de bebidas y comida han tenido que reponerse ante el incremento de clientes. El hípico se despierta para soñar ya con Extremúsika 2007.