El quiosco de flores Avelina, en el paseo de Calvo Sotelo, es legal y, por lo tanto, debe permitirse su apertura. Así se desprende de una sentencia de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx), a la que tuvo ayer acceso este diario. Esta sentencia desestima un recurso de apelación presentado por el ayuntamiento contra un fallo judicial anterior, que anulaba la decisión municipal de no autorizar la apertura del establecimiento de venta de flores.

El fallo del TSJEx cierra un conflicto iniciado en el 2001. Aquel año, el ayuntamiento decidió demoler el quiosco que la conocida florista tenía en la esquina del Edificio Múltiples. Ante sus protestas, el consistorio se comprometió a permitirle construir uno nuevo en el paseo de Calvo Sotelo, para el que se concedió licencia de obras y apertura, a nombre del hijo de Avelina, Angel Amado.

El edificio se construyó. Sin embargo, antes de su apertura, el ayuntamiento recibió la denuncia de una florista contra la concesión de las licencias. La reacción municipal fue la de dictar una resolución, en octubre del 2003, que suspendía las licencias, lo que suponía la ilegalidad de su construcción e impedía su apertura.

El hijo de Avelina, representado por el abogado Santiago Merino, recurrió a los tribunales. El juzgado de lo Contencioso-Administrativo le dio la razón el año pasado. El juez vino a decir entonces que no se podían suspender licencias ya otorgadas. El TSJEx ha confirmado esta decisión.