El fuerte aumento de aparatos de aire acondicionado registrado en Cáceres desde el 2001 también ha provocado otro incremento: las quejas de los ciudadanos que soportan los ruidos y calores del refrigerador del vecino. Estas molestias han generado un nuevo flujo de denuncias, inexistentes hasta ahora, que la Asociación de Consumidores Acuex atiende cada vez con más frecuencia. "El calor de nuestra geografía, bastante incómodo por la noche, te obliga a abrir las ventanas. La cosa cambia cuando ni siquiera puedes hacerlo por el calor y el ruido que genera el aparato de al lado", indica Lino Floriano, secretario de Acuex.

Según el Instituto Nacional de Estadística, en el 2001 más de 2,2 millones de hogares ya contaban con aire acondicionado, y esto no ha hecho más que empezar. El uso masivo va acompañado además de algunas deficiencias: muchas instalaciones no se adaptan a la legislación porque no cuentan con el permiso de la comunidad de propietarios para ubicarlas en el bloque, ni tampoco con la licencia municipal.

"Hemos comprobado que no se cumple con la normativa de ruidos y vibraciones ni con la reglamentación sobre actividades molestas, insalubres, nocivas y peligrosas", subraya el secretario de Acuex, colectivo que informa de los derechos a los afectados.

MEDIDAS Y DECIBELIOS Antes de que el aparato se instale en la terraza, en la fachada o en el patio de luces, el inquilino debe pedir permiso a la comunidad, que puede aprobarlo por mayoría simple. "El problema es que la gente lo hace sin más y ni siquiera conoce la normativa. Por ejemplo, los refrigeradores deben guardar ciertas distancias con las ventanas y otros requisitos, entre ellos no superar los 35 decibelios por el día y los 30 por la noche", aclara Lino Floriano.

El órgano competente a la hora de controlar e imponer sanciones es el ayuntamiento, que puede abrir expedientes y remitirlos a la Comisión de Actividades Clasificadas de la Junta.

Las quejas comenzaron a llegar a Acuex en el mes de junio y van en aumento. "Incluso ya se han dado casos de comunidades que deben retirar los aparatos al no lograr la aprobación de la mayoría de los vecinos". Según Floriano, una buena parte de las quejas tienen su origen en los negocios situados en los bajos de los edificios, que instalan refrigeradores de gran capacidad.

La tendencia a la compra de aparatos crece cada año y en el 2004 los fabricantes facturaron más de 1.472 millones de euros en España. En Cáceres, los compradores deben esperar hasta septiembre u octubre para su instalación, debido a las colas que existen, según Acuex.