La plataforma que promueve la restauración del convento de San Agustín de Valdefuentes confía en que las obras de rehabilitación del edificio comiencen "en tres o cuatro meses", según las estimaciones su presidente, Antonio Corchero.

Los trabajos de restauración del edificio, que el párroco se vio obligado a cerrar al culto el pasado noviembre por los agujeros de la cubierta y el peligro que suponía para los feligreses, se han cifrado en unos 190.000 euros. De momento, el colectivo ya ha reunido, con las aportaciones de los vecinos, la Obras Social de Caja Extremadura y el ayuntamiento, unos 20.000 euros.

Ahora, según explicó Corchero, están pendientes de las negociaciones entre la Dirección General de Patrimonio da la Junta y la Diócesis de Coria-Cáceres para ver que montante recibe el obispado para obras y mantenimiento de los edificios religiosos y qué cantidad se destinará del mismo a la obra del convento de San Agustín, que, según dijo el presidente de la plataforma, tiene carácter de urgencia.

Aunque el edificio necesita también actuaciones en el interior y en la fachada, Corchero señaló que lo "más urgente" es restaurar la cubierta. Para ello, se deben trasladar los nidos que las cigüeñas han construido sobre su tejado. De los 35 contabilizados, Corchero apuntó que, de momento, solo se han retirado dos, aunque la Consejería de Medio Ambiente ya ha dado luz verde a su traslado a unas unas plataformas que se instalarán en la zona de Las Canchaleras. La plataforma solicitó celeridad en esta tarea, pues de ello dependerá que las obras puedan empezar en los plazos previstos y no se tengan que retrasar "hasta julio por la cría de las cigüeñas".

La plataforma, que surgió tras la voz de alarma de un grupo de mujeres sobre la preocupante situación del convento, tiene previsto celebrar nuevas actividades para recaudar fondos. Así, el colectivo instalará una tómbola con objetos donados por los vecinos durante la Feria del Queso de Valdefuentes --9, 10 y 11 de marzo--. Además, se ha programado teatro para Semana Santa.

Corchero recordó que las cuentas para aportar dinero con el que hacer frente al coste de la restauración del convento siguen abiertas en Caja Extremadura y Banesto, y destacó la contribución de los habitantes. "Es un goteo continuo de pequeñas cantidades de dinero, pero no podemos hacerlo solos porque tardaríamos tres o cuatro años en reunir el dinero necesario y la obra es urgente", concluyó.