El presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, anunció en julio que en septiembre habría un significativo acto institucional en apoyo el proyecto de Cáceres 2016. Y tuvo lugar anoche. No hubo grandes anuncios, aunque no era ese el propósito de un encuentro organizado para reiterar a través de sus representantes el compromiso de toda la sociedad extremeña con la iniciativa de que Cáceres sea capital cultural europea dentro de nueve años. Y en esta línea fue la intervención de Vara, que puntualizó que la primera condición para conseguirlo es que los extremeños se lo crean y que presentó Cáceres 2016 "no como un símbolo, sino como un reto y un compromiso", cuyo "mejor aval" son "el 1.086.000 extremeños" (la población de la región) si van "en común y sin miedo a fracasar". Vara buscaba con su intervención la implicación de todos los extremeños en el proyecto.

Al acto, que se celebró en el auditorio, asistieron miembros del ejecutivo autonómico, alcaldes, como el emeritense Angel Calle y la placentina Elia Blanco, el presidente del PP extremeño, Carlos Floriano, además de diputados autonómicos y provinciales, representantes de la universidad y de los colegios profesionales, de los agentes sociales, del mundo empresarial, de la corporación local cacereña, de las instituciones de la región y ciudadanos. Los únicos que intervinieron fueron Fernández Vara y la alcaldesa, Carmen Heras.

Vara precisó que la diferencia entre Cáceres y otras ciudades candidatas está "en nosotros --los extremeños-- y en la capacidad de difundir un proyecto que representa una manera de vivir y de entender la cultura". Incidió en su mensaje de que "nos lo tenemos que creer" porque los extremeños "no somos menos que nadie, sino gente con la necesidad de conquistar el futuro estando juntos". Apuntó que todos los extremeños se deben preguntar qué pueden hacer por Cáceres 2016 y que este proyecto no funcionará "si no nos lo creemos todos". Recordó que hay que trabajar fuera de la región en la difusión de los valores de Cáceres porque "hay muchos a los que debemos conquistar" y subrayó que los pueblos "necesitan tener su momento y el momento de Cáceres será en el 2016".

La alcaldesa, Carmen Heras, que abrió el acto, leyó un discurso muy estructurado. Empezó dando relevancia a un acto que "abre una nueva etapa" en el proyecto de Cáceres 2016. Siguió con una exposición de lo que la ciudad ofrece por su historia y patrimonio, que la convierten en un destino turístico cada vez más conocido. A esto vinculó su actividad cultural con las citas anuales de festivales y certámenes (teatro, cine, música antigua, Womad, Foro Sur...) y con la cultura popular con manifestaciones como la Semana Santa.

El final de su intervención lo dedicó a lo que queda por hacer,como la recuperación de nuevosespacios para la cultura, como laRibera o las instalaciones minerasde Aldea Moret, y a reivindicaralgo que ya comentó a Varaen julio: la remodelación de edificiosinfrautilizados para la culturaa lo que sumó la ejecución“de otros donde albergar actividadesculturales de gran formato”.

La alcaldesa terminó subrayandoque Cáceres “necesita” lacapitalidad cultural “como credencialque nos acerque al conceptouniversal que debe tenerla cultura” y lanzando un mensajea los presentes de que los extremeñosdeben autoconvencersede que Cáceres va a ser capitalcultural europea en el 2016.

El acto de anoche fue uno delos más concurridos en apoyo aun proyecto anunciado hacecuatro año y que está aún en susprolegómenos, dado que hasta elaño 2010 no se producirá el primerpaso decisivo en la carrerapor la capitalidad. El 2010 es lafecha máxima para que se publiquela convocatoria de presentaciónde ciudades candidatas españolas.Y la lista aumenta. En el2003 Cáceres y Córdoba eran lasdos únicas interesadas en optar.Ahora hay otras diez ciudades.Será en el 2011 cuando un comitéde selección realice la primeracriba y un año después seelegirá a una candidata.El comité tendrá 13 miembros(seis designados por España y sietepor la UE). Si Cáceres es la elegida,aún faltará una última fasede seguimiento del programa.