Un impresionante atasco sorprendió a varios cientos de conductores a la salida del ferial anoche, tras concluir el tan esperado día del niño, con la masiva asistencia al recinto, ya que el precio de las atracciones se había rebajado a la mitad durante toda la jornada. Sobre las 10.30 de la noche la salida del ferial por la N-630, junto a Ceres Golf, se convirtió en un hervidero de coches que intentaban salir de la zona sin conseguirlo.

El problema, lejos de amainar, fue creciendo hasta el extremo de que los policías locales no daban abasto a regular el tránsito de vehículos. Ni siquiera la llegada de la Guardia Civil evitó que los conductores quedaran atrapados ante la indignación y la impotencia de los ciudadanos, lo que incluso provocó varios disturbios.

LA CAUSA La falta de previsión, con insuficientes accesos, se mostró de forma manifiesta en un ferial que estaba a rebosar de público.

Los ciudadanos ya denunciaron el martes la falta de agentes en el cruce del ferial con Ceres Golf, de visibilidad limitada, por el que deben salir obligatoriamente los coches aparcados en la plataforma delantera. Al cierre de esta edición centenares de personas seguían esperando, atrapadas en los estacionamientos. El jefe de la Policía Local, César García, aclaró por la mañana que este cruce compete a la Guardia Civil y anunció que el edil de Tráfico, Santos Parra, había remitido una carta al subdelegado del Gobierno para que Policía Nacional y Benemérita colaboraran con el dispositivo.

La policía local mantiene tres turnos diarios de 20 agentes para garantizar la seguridad las 24 horas. Así lo anunció ayer César García, que también comunicó el nuevo sistema de accesos y destacó el esfuerzo realizado por la jefatura para cubrir estos servicios y mantener los usuales. Los agentes regularán la entrada al ferial por la rotonda de la N-630, la circulación interior, la carga y descarga en el recinto y el acceso de los vehículos de servicio. También hay un punto continuo de atención.