El presidente de la Asociación de Vecinos del Residencial Universidad de Cáceres, Lorenzo Clemente, lamenta que "no hayan recibido apoyo por parte de ningún partido, ni siquiera la más mínima disculpa", después de "tres años clamando en el desierto", por el problema de esta urbanización construida en suelo no urbanizable de protección especial.
Según recoge la agencia Europa Press, esta queja se la transmite al Comité Local de Unión Progreso y Democracia (UPyD) en una reunión, en la que expuso la problemática del barrio y que forma parte de la política de acercamiento a barrios que lleva a cabo esta formación de Rosa Díez.
"Hemos pasado 3 años clamando en el desierto y nadie ha venido a vernos. Los políticos no quieren asumir ningún tipo de responsabilidad. No hemos recibido apoyo por parte de ningún partido, ni siquiera la más mínima disculpa", asegura Clemente a UPyD.
Según la formación política, Clemente confía en que los jueces no tomen las decisión tan drástica de derribar las casas, tal y como recoge una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura (TSJEx) y ratificada por el Tribunal Supremo (TS), "ya que tirar el residencial costaría unos 120 millones de euros, amén de la repoblación y las indemnizaciones a que hubiera lugar".
Una vez que el problema está prácticamente resuelto UPyD considera que "es hora también de asumir responsabilidades políticas, por parte de los partidos (PSOE y PP) responsables en su momento, de las administraciones autonómica y municipal, que con su incompetencia, tanto daño han causado a estas familias".
