El concejal independiente, Felipe Vela, confirmó ayer que no votará en contra de la aprobación inicial del nuevo plan general municipal, denominación que la ley del suelo da a los planes generales de ordenación urbana (PGOU), y que estaba "preparado para que se aprobara" en el pleno que inicialmente se iba a convocar a finales de julio para su aprobación inicial, sesión que se ha aplazado hasta septiembre.

El PGOU fue una de las causas de la salida de Vela del gobierno al no estar de acuerdo con cómo se estaba gestionando su elaboración. El concejal indicó que no va a entrar en esa cuestión, pero sí en que estén garantizadas una serie de infraestructuras necesarias "para una ciudad moderna". Precisó que el plan presentado "tiene mi voto", pero que esto tampoco se puede interpretar como un cheque en blanco. "Si no surgen problemas, lo normal es que vote a favor", comentó.

Todos los votos son fundamentales dada la actual configuración del pleno, con el PP en minoría y 12 ediles, ya que la ley de régimen local establece que es necesario el voto de la mayoría absoluta (la mitad más uno de una corporación con 25 ediles) para los acuerdos que afectan a la tramitación de los instrumentos de planeamiento general previstos en la legislación urbanística. Aunque Vela o el edil de IU, Santiago Pavón, optasen por la abstención, no serviría el voto de calidad del alcalde.