Felipe Vela no tardó ayer en comparecer ante la prensa y lo hizo en un escenario mediáticamente bien elegido: el Palacio de la Isla, lugar desde donde durante prácticamente dos años ha gobernado el 2016, sin duda la iniciativa más ambiciosa a la que se enfrenta la ciudad en la última década. Y lo hizo desde un 2016 del que ha salido reforzado por el presidente de la Junta, Guillermo Fernández Vara, que ha apostado porque el auditor cacereño se mantenga como consejero delegado del Consorcio y liderando el proyecto Intramuros, una iniciativa auspiciada por el propio Vela que pretende la revalorización y reforma integral del casco histórico de Cáceres.

Pero Vela saltó ayer a la palestra para explicar, con todo detalle y sin reparos, los motivos que le han llevado a romper el pacto de legislatura que en junio de 2007 firmó con la alcaldesa para garantizarle su entrada en la Alcaldía. El concejal de Foro Ciudadano, desde ayer en la oposición, calificó los últimos 20 meses de legislatura como "un periodo francamente negativo". Por ello pidió "disculpas" a los ciudadanos y lamentó que el tripartito no haya sido capaz de "orientar un proceso de cambio, que es a lo que Foro Ciudadano --dijo-- se había comprometido".

El concejal, sereno, defendió no obstante su "trabajo" en el seno del gobierno de Carmen Heras, y en reiteradas ocasiones puso como ejemplo los proyectos "terminados y encima de la mesa" que ha dejado tras su cambio de rumbo en el hemiciclo cacereño. Se refirió, entre otros, a los párkings, al proyecto Intramuros, al centro de ocio y, de rebote, al Plan General Municipal y El Corte Inglés, iniciativas que Vela se ha comprometido a apoyar --recordó que muchas de ellas son fruto de su gestión-- tras el acuerdo por escrito que alcanzó el lunes en Mérida durante su reunión con la alcaldesa y el presidente de la Junta.

¿Pero cómo fue ese encuentro en el despacho de trabajo de la residencia privada del presidente?: entrañable y tranquilo. Fuentes cercanas a los más estrechos colaboradores de Felipe Vela aseguran que el concejal mantiene muy buena relación con el presidente. Vara ve a Vela como su socio natural en el gobierno de Cáceres y a la cita del lunes el presidente fue con una pregunta muy clara: ¿Qué hacemos con esto?

El jefe del Ejecutivo, según estas mismas fuentes, siempre ha estado muy preocupado por la inestabilidad del voto del portavoz de Izquierda Unida, Santiago Pavón. Pero en el transcurso de la reunión en ningún momento Vara dio un tirón de orejas a la alcaldesa, más bien medió para que el desencuentro con el líder de Foro Ciudadano fuera lo menos doloroso posible.

Llegados a este punto --Vela había dejado muy claro que con Pavón en el gobierno no había acuerdo que valiera--, la única solución que quedaba (la menos traumática quizás) era tener al conocido abogado en la oposición, pero garantizando su voto en los asuntos de interés general para la ciudad.

Vela aceptó la propuesta, aunque insistió, como ayer mismo reconoció en su comparecencia, en que en el acuerdo figurase de forma explícita el apoyo de la Junta al proyecto Intramuros y la intervención del concejal en el mismo. Y Vara "lo hizo encantado", concluyó el edil, quien no quiso dejar escapar la oportunidad de recordar que sin Intramuros "es absolutamente inviable que Cáceres sea capital europea de la cultura en el año 2016" y que este proyecto "no está ubicado en el ayuntamiento" sino en el Consorcio, "un ente que tiene --insistió-- personalidad jurídica propia, diferente de los entes que lo conforman". Pero aún dijo más: "como todos saben Intramuros es un proyecto que hace, ejecuta, prepara y dona la Fundación Cáceres Siglo XXI, de la cual soy fundador y presidente".

LAS "GARRAS" DE PAVON En este mismo sentido, Vela aludió al "buen criterio" que tuvo el gobierno dejando la revitalización del casco histórico "fuera de las garras" de Santiago Pavón. Esta fue la primera crítica que el concejal lanzó contra el primer teniente de alcalde. No fue la única. Vino a decir que Pavón torpedea el normal desarrollo del gobierno, que "no vota por sistema las cosas para Cáceres, seguramente porque no le da la gana" (puso el ejemplo de los párkings) e incluso se llegó a preguntar "si va a haber falta de corazón con la ciudad de Cáceres" para que el líder de IU no dé el sí a los proyectos más relevantes para el desarrollo de la capital cacereña. "Cáceres no puede estar sin esos proyectos", sentenció.

¿Está arrepentido Vela de su pacto con Heras? "En absoluto", respondió el concejal, pero sí "dolido, triste y decepcionado". ¿Por qué? Por un lado porque los dos años de gobierno "han sido malos" (aunque según Vela los de Saponi, incluyendo el tiempo en que el auditor estuvo como concejal de Economía del PP, fueron mucho peores) y por otro porque la alcaldesa ha elegido finalmente a Santiago Pavón.

Vela se definió ayer como el "perdedor" de la batalla. Pero a él no le gusta que le tengan compasión, así que dejó claro que su partido "no tirará la toalla", que gracias a esta crisis Foro " ha vuelto a recuperar la palabra" y que la auténtica perdedora ha sido Carmen Heras: "En mi opinión hay un concepto que pierde: la gestión", frente a unos votos, los de Pavón, que quizás también pierda porque los votos --sentenció Vela-- "siempre serán una incógnita" tratándose del líder de IU.

EQUIVOCACION A juicio de Vela la ciudad no tardará en darse cuenta de que la alcaldesa ha tomado una decisión equivocada. "Serán los ciudadanos --vaticinó el concejal-- los que demanden a Pavón que demuestre que quiere a la ciudad de Cáceres".

Foro Ciudadano "no podía seguir perdiendo el tiempo". Por eso, y Vela lo dejó clarísimo: "el tripartito se ha roto". Pero Heras, de momento, no tiene qué temer porque su exsocio volvió a garantizarle ayer que no habrá moción de censura "salvo que hagamos una encuesta, haya problemas tan graves en el ayuntamiento que me digan los ciudadanos, señor Vela, hagan ustedes lo que tengan que hacer. Tampoco creo que lleguemos a estos extremos", tranquilizó.

Según Vela, Cáceres "no puede tener un cambio en esta legislatura" y él se "corresponsabiliza" para ello. Pero aún así, el portavoz de Foro confía en los nuevos tiempos: "Empieza una nueva etapa, me gustaría que ya fuera la última hasta el año 2011". De hecho, de forma inminente "cesará" de todas las "encomiendas" que le confirió la alcaldesa.

Recuperado de la indisposición que el pasado miércoles lo llevó a la clínica quirúrgica San Francisco, Felipe Vela, sin papeles y con un guión bien aprendido en la cabeza, terminó así su comparecencia de ayer: "El ayuntamiento se ha perdido una gestión importante, la de este concejal, pero a cambio probablemente tendré la satisfacción de no visitar ya tanto la clínica".