Actor, cantante, juglar, trovador, cuentacuentos y mucho más... Enseña la Ciudad Monumental como nadie, rescatando historias antiguas y trasladando al público al pasado, de la manera más divertida y curiosa que uno pueda imaginar. Sorprende al visitante con coplillas, chascarrillos y viejas retahílas, envolviéndole entre las piedras con romances, cuentos, leyendas y mentiras. Extrovertido con un toque tímido, entrañable, sencillo, cercano, sin miedo escénico, con mucho teatro a sus espaldas. Un amor!!

--¿Dónde nació Vicente?

--En Cáceres, en la Casa de la Madre, en el año 1959. Fui el pequeño de dos hermanos.

--¿Recuerdos especiales de su infancia y su adolescencia?

--Mis padres son de Pinofranqueado, dónde pasábamos las vacaciones y visitábamos a los abuelos. Mi padre trabajaba como funcionario y tuvimos muchos traslados. Mi infancia la pasé en el pantano de Cíjara, Guadalupe, Santiago de Alcántara... No olvido una mudanza en una DKV, iba atrás entre los muebles, un sueño de viaje hoy prohibido. Cuando tenía 7 años, recuerdo con cariño pasar largas horas conversando con un señor portugués que me montaba en su barca y pescábamos anguilas y otros peces del Tajo, antes de que se construyera el pantano de Cedillo. Soy muy fluvial, los ríos me encantan. También recuerdo los primeros amores, jugar en la sierra, en la calle, los largos viajes de Santiago de Alcántara a Cáceres en esos coches de línea...

--¿Cuándo descubrió que quería ser artista?

--A una edad muy temprana. Ya en el colegio hacía mis pinitos como cantante y pequeñas representaciones.

--¿Un rincón de Cáceres?

--La ciudad tiene rincones muy bonitos, pero yo destaco dos: el Barrio Judío o Barrio de San Antonio, justo donde está la Sinagoga; y la Cuesta de la Compañía.

--¿Qué cambiaría de la ciudad?

--Físicamente cambiaría muchas cosas, especialmente del casco antiguo, todo lo que molesta al campo visual en la zona monumental. También la accesibilidad, por la que recibimos en su día un premio y carecemos de ella, no es real, pero es fácil de conseguir. Además, cambiaría el cableado y las señalizaciones de calle, que bajo mi punto de vista no son las adecuadas para una ciudad Patrimonio de la Humanidad. Y si se pudiese cambiar..., cambiaría la mentalidad de la gente, que aprendiesen a valorar su ciudad. El cacereño es muy conformista, crítico, poco activo, pero muy buena gente, eso lo dice todo el que viene de fuera. Deberíamos tener muy presente que nuestra industria más importante es la Ciudad Monumental y está por explotar.

--¿Un lugar de Extremadura donde recargar pilas?

--Hay muchos, pero aparte de Las Hurdes y de mi Pinofranqueado del alma, me encanta la Raya. Me gusta mucho Cedillo, su gente, sus calles, su entorno....

--¿Qué recetas típicas extremeñas son sus preferidas?

--Cualquier receta hurdana: cabrito asado, ensalada de limones o los platos que llevan setas, me encanta el mundo micológico.

--¿En qué trabaja actualmente?

--Desde hace cuatro años, y casi todos los fines de semana, estamos embarcados con empresas, colegios, instituciones, turismo y colectivos de todo ámbito cultural, en algo que nació hace cinco años junto a mi amigo y compañero Patxi, después de conocernos y trabajar en 'Evocados'. El proyecto se llama 'Cuenta Trovas de Cordel', somos animadores teatrales, tenemos varios títulos: 'Juglar por Juglar', 'Juglar por las aves' y 'Juglar por la Noche', el de más éxito. Este se hace con un guía oficial, recorriendo la parte antigua con los visitantes. Los actores, un cuentero, un actor de corral de comedias y un ciego, vamos apareciendo puntualmente deleitando sus oídos con las diferentes historias. Contactan con nosotros a través de los hoteles, las oficinas de turismo o nuestra página web: 'www.cuentatrovas.com'. Tenemos visitantes de cualquier punto de España y también los propios cacereños.

--¿Cómo ve el turismo en Cáceres, con el que trabaja tanto...?

--Bien, pero es un turismo muy de paso, hay que fomentarlo y dar opciones para que se queden a dormir. Por regla general el cacereño se muestra amable y cuida al visitante, que suele venir de turismo cultural, a ver piedra, historia..., y generalmente completa el circuito con Mérida, Trujillo y Plasencia. Cáceres tiene un casco antiguo importantísimo, pero le faltan edificios visitables a los que el turista pueda dedicar más tiempo. Si viene un lunes se queda sin ver nada porque todo cierra, incluso la Oficina de Turismo.

--¿Proyectos a la vista?

--Estaré en Radio Nacional con relatos de microcuentos, 'Cuenta Trovas con Palabras de Cordel'. Próximamente haré un ñaque, una historia entre dos actores que está moldeando el dramaturgo Isidro Timón. También queremos llevar el juglar al teatro de la mano de Isidro. Además, proyectamos visitas guiadas en Badajoz (Almossassa) y en agosto actuaré en Málaga en un festival judío con un nuevo proyecto, un grupo de música, canción y poesía sefardí. ¡Y seguir trabajando mucho!