Un vigilante de la empresa Prosegur permanece ingresado en estado grave en el hospital San Pedro de Alcántara tras sufrir a mediodía de ayer un accidente en el cruce de Aldea Moret con la avenida Juan Pablo II (antigua travesía de la N-630) al ser embestido por un camión de 5.000 kilos de la empresa Buytrago, cuyo conductor resultó ileso. Pedro Javier L. R., de 31 años de edad, sufre una fisura en el bazo y una lesión en arteria renal, y tuvo que ser rescatado por los bomberos tras quedar atrapado en el interior del vehículo oficial de la empresa.

A falta de que se determinen las causas exactas del siniestro, la policía local investiga si uno de los dos vehículos se saltó uno de los semáforos de la travesía o a la salida del puente de Aldea Moret. El choque fue de tal violencia que desplazó hasta la mediana de la avenida Juan Pablo II al Opel Corsa, conducido por el vigilante y matrícula 0273 FXN y que venía desde el puente. El otro vehículo pesado iba en dirección salida hacia la carretera de Mérida y sufrió daños en el frontal. Su conductor, F. R. B., de 55 años, descansaba ayer en su domicilio con un golpe en una de sus rodillas. Fuentes de la empresa Buytrago explicaron ayer que el repartidor dijo que había pasado el semáforo en verde.

La hora a la que sucedieron los hechos --alrededor de las 13.50-- complicó las labores de los servicios de emergencia. Los dos carriles de salida de la antigua travesía tuvieron que ser cortados, lo que provocó un atasco que llegaba desde el cruce con el puente de Aldea Moret hasta la rotonda de Renfe. Camiones y turismos quedaron atrapados mientras los bomberos lograban rescatar al vigilante de seguridad del interior de su vehiculo, destrozado en la zona lateral del conductor.

REGULAR EL TRAFICO Al lugar del accidente se desplazó una ambulancia del servicio de emergencias del 112, que trasladaron de inmediato al herido al hospital San Pedro de Alcántara. Hasta cuatro dotaciones de la policía local acudieron a la zona, donde se emplearon a fondo para regular el tráfico en los accesos al puente, que no tuvieron que ser cortados, y en las salidas y entradas de la calle Túnez, donde está ubicada la estación de autobuses. La situación de tensión provocó incluso que un vehículo que circulaba en dirección a la glorieta de Renfe fuese alcanzado por un camión de los bomberos con resultado de daños materiales.

Los trabajos de limpieza de la calzada obligaron a mantener cortada la carretera durante algo más de 20 minutos, tiempo que emplearon los operarios de Conyser en limpiar de cristales y de otros restos la carretera. El tráfico no quedó totalmente restablecido hasta las 14.10 horas.

También fue necesario que una grúa se desplazara hasta la zona para remolcar el vehículo de Prosegur, en cuyo interior también podía verse cómo, a consecuencia del fuerte impacto, se había activado el airbag.