Una imagen poco usual sorprendió ayer a quienes paseaban por Cánovas. Hubo quien pudo llegar a pensar que algunos asistentes al Womad habían ocupado Cánovas con sus enseres, pues en un pequeño espacio, exactamente 30 metros cuadrados delimitados por una cuerda junto al Quiosco de la Música, se distribuían un colchón, varias sillas, una mesa de estudio, una estantería y una pequeña cocina.

Pero no se trataba de ´okupas´. Tampoco del rodaje de alguna escena de la popular serie Aquí no hay quien viva , pese a que carteles con este slogan se distribuían por todo el espacio. Era la escenificación que los jóvenes de Nuevas Generaciones del PP habían preparado para simular cómo puede ser la vida en los pisos de 30 metros que propone la ministra María Antonia Trujillo.

"Queremos que la gente no imagine, sino que tenga la posibilidad de ver realmente lo que son 30 metros y lo que en ellos cabe, para poder afirmar que no reúne condiciones para vivir dignamente", señaló Alberto Casero, presidente provincial de NNGG de Cáceres.

Y junto a este fin, también un objetivo más político: criticar la propuesta de la ministra y la política de vivienda y juventud del Gobierno central.

Casero insistió en que la propuesta de "los pisos de 30 metros cuadrados es una idea peregrina de la ministra", que se le ha ocurrido, según dijo, "para poder salir del atolladero en el que se ha metido, porque todo el presupuesto que había para la política de viviendas se ha gastado en crear el propio ministerio".

La escenificación, que ya se realizó en Badajoz, también se hará en el resto de las grandes ciudades de la región.