Por fin llegó el gran día. El lunes se retiraron los contenedores de la ciudad monumental, y solamente estarán a la vista de la gente entre las 20.00 y las 10.00 horas. El antecedente de esta iniciativa ha sido la zona de Intramuros, donde hace dos años que los basureros dejan vivir y oler tranquilos a los vecinos y turistas.

Desde ese día, y con previo aviso de la alcaldesa de Cáceres, Carmen Heras, que envió a cada uno de los residentes una carta para alertar de la medida, los basuseros han desaparecido de las calles Sierpes, Pizarro, San Ildefonso, Zapaterías, Tenerías, y de las plazas de Santa Clara, la Concepción y Canterías. "Los vecinos están muy contentos", indicó el director de operaciones de Conyser, Jesús Morán, aunque dijo que la iniciativa aún se encuentra en el periodo de implantación: "en general la gente está respondiendo bien, aunque el lunes encontramos basura en el suelo porque hay gente que no se había enterado o se le había olvidado que se iban a quitar. Habrá que esperar a que todo se estabilice, aunque si observamos que hay reincidencias, habrá que tomar medidas", dijo Morán.

Ya se hizo en Intramuros

Sin embargo, no se mostró intranquilo por el descuido de algunos ciudadanos "está ocurriendo lo mismo que lo que sucedió en la zona de intramuros, y allí ahora la iniciativa funciona muy bien, los vecinos lo han entendido perfectamente", aseguró.

Encarna Lázaro, una vecina de la calle Gloria, situada en la zona Intramuros, confirma las palabras de Morán: "me parece muy bien, porque por lo menos no hay suciedad en la calle, nosotros vamos por la noche a tirar la basura, o incluso por la mañana antes de que se los lleven, hasta las diez de la mañana tenemos tiempo", dijo. Natalia Vaz reside también entre las calles que se encuentran tras la muralla y aplaude de igual manera esta iniciativa de hace un par de años: "me parece muy bien porque supuestamente la basura se tiene que tirar por la noche, de esta manera está todo mejor cuidado", indicó.

Zona comercial

Las calles de la ciudad monumental de las que hace dos días se han retirado los contenedores acumulan una gran cantidad de comercio y hostelería, para los que, en un principio, esta iniciativa pudiera ser un problema. En cambio, según indica el director de operaciones de Conyser "hasta la fecha hay una alta satisfacción por parte de los usuarios industriales". De hecho, Víctor Marroyo, que regenta una panadería justo en las cuatro esquinas cree que es "estupendo, lo que no se puede tener es el casco histórico con una pila de contenedores oliendo, en mi panadería el olor se entraba hasta dentro y era desagradable", confesó. Apolinar Sandoval, que tiene un estanco en la calle Zapaterías, comparte esta misma opinión: "está muy bien, ahora hay una higiene y una limpieza para todos, la parte antigua se merece un poco de decoro. Nosotros, los comerciantes, nos acostumbraremos a tirar la basura a las horas correspondientes", explicó. Además, a partir del lunes, Conyser recoge puerta a puerta los recipientes de cartón de los establecimientos de la zona.

"Esta actuación mejora mucho el aspecto de la calle, parece incluso que hay menos basuras", aseveró Morán. De hecho, dijo que en algunos lugares como la calle de La Cruz, Gran Vía o Doctor Durán ha habido que reducir el número de contenedores porque el nivel de basura ha descendido desde que existe esta medida.