Cada vez es más frecuente la imagen en las páginas deportivas de los periódicos regionales: jugadores de tal o cual club se han acercado a las aulas de un centro educativo de su localidad o alrededores y han pasado buena parte de la mañana con los escolares. Repartir autógrafos, regalar entradas, hacerse fotografías, dar consejos e incluso echar un partidillo . Las sonrisas de los niños --y no tan niños-- se multiplican en esas sesiones organizadas por los propios equipos con la encantada colaboración de la dirección del colegio.

No es una moda casual. Los clubs son conscientes de que tienen que hacer cantera, no ya de jugadores, sino de aficionados. En una época en la que el deporte regional lo tiene difícil para competir en cuanto a referentes con el nacional, arrancar a jóvenes que se enganchen a acudir en vivo a los encuentros es una gran inversión de futuro. Esto incluye a sus padres.

Por su parte, los deportistas acuden encantados la mayoría de las veces: hay que tener en cuenta que, aparte de las dos o tres horas de entrenamiento diarias, no tienen demasiado que hacer y también lo pasan bien dándose un baño de multitudes. Los contratos publicitarios con Marca Extremadura también obligan a transmitir una imagen positiva y que traslade valores de salud.

CASOS LLAMATIVOS Probablemente, las dos entidades que más se mueven en este sentido son el Cáceres 2016 de baloncesto y el Club Deportivo Badajoz de fútbol. Rara es la semana en la que profesionales de sus respectivas plantillas no acuden a compartir unos momentos emocionantes con los colegiales. Incluso el Cáceres 2016 tiene ubicadas a sus categorías inferiores en un colegio paradigmático para el baloncesto regional, el San Antonio, donde recientemente inauguró su ronda de visitas con la presencia de Roger Fornas y Xavi Forcada.

"Para nosotros es clave. Nuestro principal fin es el social, que los jugadores sean importantes en la vida de los chicos, que supongan un ejemplo de vida sana. Es curioso: muchas veces les preguntan cómo llegar a ser profesionales como ellos y las respuestas son siempre que se coman todo lo que les ponen en el plato, que practiquen deportes, que no se queden en casa con la Play Station todo el día", cuenta Jorge García León, responsable de comunicación y marketing del club de baloncesto, que calcula en 30 los actos de este tipo que se organizan por temporada. En cada uno de ellos reparte unas 100 entradas.

En su opinión, "cuanto más impresiones a un niño de esta edad, más posibilidades tienes de que pueda salir de ahí un jugador o un aficionado en el futuro. En mi caso, nunca olvidaré cuando vino a mi colegio Juan Antonio Corbalán para charlar con nosotros, ni cuando hubo un campus de baloncesto en Cáceres organizado por el Granollers con Wayne Robinson y Chichi Creus".

A menudo se producen escenas de júbilo y cierto descontrol, como cuando la pasada semana los jugadores del CD Badajoz David Carmona, Tete y Josete Abarca estuvieron en el Colegio Santa María Assumpia.

El salón de actos estaba lleno con 400 niños. Los jugadores tuvieron que responder a todo tipo de preguntas: desde el asunto de la puerta-camilla de Almendralejo a que si tienen tiempo de ligar despues de los entrenamientos. Para Tete fue un acto muy entrañable ya que el fue antiguo alumno del colegio y fue saludado por muchos profesores y la directora.

El espectáculo continuó en el patio del colegio. En medio de una gran algarabía, los jugadores firmaban autógrafos y Josete Abarca hizo las delicias de los pequeños con sus toques de balón e incluso se quitó la camiseta sin que se le cayera. Además, se atrevio a hacer flexiones con el balon en la espalda. Tete y David Carmona tambien hicieron sus malabarismos.