Todavía no es muy habitual ver a una mujer llevando las riendas de un club deportivo, aunque mucho menos lo es en el mundo del rugby, un deporte donde el índice de féminas viene a ser verdaderamente escaso. Alicia Rodríguez puede presumir de haber roto esta barrera y ser la presidenta del CAR Dragones de Zafra.

El club nació en el 2002, cuando cinco jugadores seniors que procedentes de centros universitarios de Sevilla, Badajoz y Cáceres echaban de menos el poder jugar. Se reunieron y empezaron a concebir la idea de montar un equipo. Y así lo hicieron. En el 2004 fundaron el Club Amigos del Rugby Dragones de Zafra. Los comienzos fueron difíciles con entrenamientos en el recinto hípico del ferial de Zafra. Poco a poco se empezó a captar a gente para crear el equipo y dar forma al proyecto.

Actualmente sólo hay un solo equipo en el que conviven seniors, juveniles y cadetes. "Hace dos años teníamos equipo de seniors y juveniles, pero la gente va creciendo se van a la Universidad- , pero esto queremos que cambie en la próxima temporada ya que la directiva nos hemos propuesto como reto contar con un equipo de cadetes, otro juvenil y el senior", dice la propia Rodríguez.

El presupuesto es "insignificante", puesto que no llega a los 900 euros. La pasada temporada compitieron en categoría regional, dadas sus limitaciones económicas y de personal. En cambio presumen de tener una gran ilusión que suple su precariedad. "Es nuestra cuarta temporada y cada vez se nota más que los jugadores, sobre todo los más jóvenes, van conociendo el deporte, la colocación en el terreno y las tácticas de juego. La temporada pasada ganamos todos los partidos que jugamos menos contra Cáceres que es nuestra espinita clavada".

El club aspira a asentar este deporte en la localidad segedana y poder contar con equipos en las distintas categorías y lograr por tanto que el rugby se implante como una opción deportiva más frente a otros deportes con más arraigo. " En cuanto a lo deportivo somos modestos. Nuestro objetivo es crecer en nuestra liga regional y poder disponer de muchos partidos amistosos para adquirir experiencia, ritmo de juego y que los chavales se enganchen al rugby", afirma la presidenta.

Echando la vista atrás, Rodríguez destaca las dificultades que se encontraban en un principio. "El primer día que fuimos a entrenar a los cadetes los tapaban los jaramagos y demás hierba-, luego lo adecuaron un poco pero siguieron entrenando en tierra y cuando llovía era un auténtico barrizal-, luego el Ayuntamiento nos facilitó poder entrenar en un campo de césped".

En busca de ayudas

Los Dragones de Zafra cuentan con un apoyo casi simbólico por parte de las instituciones y desde el club se reclama que se apoye más a este deporte. Ellos trabajan también desde los despachos para encontrar un patrocinador. "Tenemos que reconocer que no es un deporte muy conocido en nuestra comunidad, y es una pena. Pero todo es cuestión de trabajar y de divulgar la cultura del rugby, de conseguir ayuda por parte de los colegios, Ayuntamientos y de la Junta-, Nuestro deber como amantes del rugby es potenciar y promocionar nuestro deporte en la medida que podamos. Quien prueba el Rugby lo lleva en la sangre toda la vida", sostiene ilusionada Rodríguez.