Eran las ocho menos cuarto de la tarde y los fuegos artificiales anunciaban el fin del Carnaval Romano. Cinco días multitudinarios de colorido y diversión que han transcurrido sin grandes incidentes y con una fiesta que crece cada vez más. Por segundo año consecutivo el Martes de Carnval era festivo y eso ayudó a que la participación en los actos programados desde el mediodía fuera muy elevada. La jornada comenzó con la actuación del Coro de Mérida y la Chirigota del Sheriff, que ofreció en la carpa municipal su primera actuación fuera de Cádiz. Este año con el tipo de ‘Los Quitapupas’, subidos al escenario dispuestos a «quitar todas las penas».

Tras el recital carnavalero llegó el turno de las migas y sardinas que se repartieron de forma gratuita a todos los asistentes con la colaboración de la asociación de vecinos de La Antigua y el bar El Callejón. El buen ambiente reinó en la plaza de España hasta pasadas las seis de la tarde, cuando la comitiva de la Sardina (este año, en lata) partió en en dirección al Puente Romano para la quema escoltada por la percusión de los pasacalles. Pasadas las siete y media de la tarde los fuegos artificiales ponían el broche de oro a la fiesta.

El buen ambiente se mantuvo en la ciudad ya desde la noche del lunes con las voces de chirigotas y comparsas en un cantacalles con gran afluencia de público al ser ayer festivo. Cabe recordar que también en la noche del lunes se celebró el XI Concurso Nacional de Drag Queen ‘Tomás Bravo’. En esta ocasión la gran triunfadora fue la drag Xena La Crim, de Madrid. Participaron además en el concurso las drag Kristo Strabagantha (Sevilla), ganadora del año pasado; Luck (Las Palmas); Osiris (Mérida) y Sirio (Murcia).