José Luis Mateos ha sufrido más de cinco robos desde 1997, año en el que abrió su estanco en el Paseo de la Estación. El pasado mes de octubre trasladó su negocio a la calle Agustín Carreño, un lugar mucho más transitado, aunque parece ser que esto no ha sido un freno para los amigos de lo ajeno que en la madrugada del sábado volvieron a ensañarse con su establecimiento.[wv01]Según un vecino que presenció los hechos, se trataba de tres hombres encapuchados que como relata el propietario del estanco "usaron un inhibidor de frecuencias para que no saltara la alarma, puentearon el cajetín electrónico del cierre para poder subirlo, rompieron el cristal blindado y se llevaron todo el tabaco que estaba en cajas". Estos hechos hacen pensar a José Luis que se trata de una banda organizada, porque opina que "la manera de entrar en el estanco no es propia de unos ladronzuelos". Mateos opina que normalmente el tabaco que le roban va a parar a bares de carretera donde seguramente lo malvenden. Asegura que"el tabaco lo tienen vendido antes de robarlo". José Luis opina que "en Navalmoral siempre ha habido robos, pero es normal porque no hay ningún tipo de vigilancia. Si yo fuera ladrón también vendría a robar aquí". Ha probado con muchas medidas de seguridad y ya no sabe que hacer para evitar los saqueos porque cada vez se las ingenian mejor para entrar en los establecimientos. Cree que "si hubiera más presencia policial y movieran más los coches por toda la localidad, se podrían evitar muchos robos". José Luis afirma que "los propietarios de negocios están alarmados ante las elevadas cifras de robos", pero cree que reunirse con las autoridades no serviría para nada,de hecho opina que "este y todos los alcaldes están más preocupados por el partido que por el pueblo. Es más, creo que de la mayoría de los robos ni se enteran". El propietario reconoce que se están escuchando muchos casos de robos en locales comerciales que se encuentran en pleno centro de Navalmoral, lo que resulta muy alarmante, pero considera que no hay una solución posible a la vista, ya que "las denuncias a la policía no sirven para nada".