Ya se puede ver como se van alzando, por fin, las columnas de la estructura del nuevo instituto de Navalmoral. Mucho presumió el PP durante la anterior legislatura de su inminente construcción, pero han tenido que pasar otros tres años más para que el mismo vaya siendo una realidad palpable. Cuando los actuales munícipes tomaron posesión de sus responsabilidades, del tan traído instituto sólo había una declaración de intenciones por parte de un Ministerio de Educación y Cultura que próximo a soltar las competencias educativas en favor de las Comunidades Autónomas, estaba tirando con pólvora del Rey. Lo mismo que después hizo el INSALUD en materia de asistencia sanitaria y lo mismo que ahora hace el Ministerio de Sanidad y Consumo, para el que ahora, que todas las transferencias en materia de asistencia sanitaria están transferidas a las distintas Administraciones Autonómicas, es fundamental la habitación para cada paciente. O sea, lo que anunció nuestro Presidente Ibarra y para la que no le permitieron a la Junta de Extremadura entrar en los hospitales del INSALUD para ir haciendo los proyectos de obras necesarios, que ahora si están ya redactados y comenzarán a ejecutarse en los próximos meses. Tiene gracia, cuando la responsabilidad es de uno mismo, no es viable el proyecto de facilitar a cada paciente su propia habitación. Cuando la responsabilidad es de los demás ya no es que sea viable, sino que es conveniente y exigible. De cualquier manera, lo cierto es que el actual equipo de gobierno ha tenido que sortear toda una serie de dificultades, para facilitar a la Junta de Extremadura los terrenos necesarios para la construcción del tercer instituto moralo. Y no han sido pocas las patadas que el concejal de Educación, Ramón Vicente, y la propia alcaldesa han tenido que dar hasta poder ver cómo se empezaba la obra que ahora se va viendo por fin. Exactamente lo mismo nos va a pasar con el nuevo Centro de Salud, que esperemos podamos ver cómo empieza su construcción también en breve. Por cierto, Centro de Salud cuya ubicación tiene suscitada una cierta polémica entre algunos vecinos de nuestra localidad, no sin falta de razón, al menos aparentemente. Hay que decir muy claro que el terreno para su construcción, también fue elegido por el PP, por lo que en todo caso su ubicación sería en gran parte responsabilidad de ellos. Sin embargo y para no faltar a la verdad, lo cierto es que entre los terrenos de los que disponía el Ayuntamiento, que fueron ofrecidos a la Gerencia de Atención Primaria, responsabilidad aún del PP, el que reunía un mayor número de requisitos de entre los necesarios para la construcción del Centro, era el que eligieron. Por lo que no sería justo achacarles arbitrariedad ni capricho en la decisión adoptada. Ojalá el ayuntamiento hubiese tenido un terreno lo suficientemente grande, propio o posibilidades de conseguirlo, en pleno centro de la localidad. Pero la realidad no era esa y entre los terrenos que pudieron ofrecer al INSALUD, en la cuestión de lejanía del centro de la población, no había muchas diferencias. Y esta cuestión siempre podrá remediarse mediante la instauración de un buen servicio de bus urbano que Navalmoral está ya pidiendo a gritos. No olvidemos que hay una nueva infraestructura ya inaugurada, lejos del núcleo urbano, que ha levantado bastantes expectativas de uso, la piscina cubierta. Pero a lo que yo me quería referir era a que mucho anuncio, pero han tenido que ser los actuales gobernantes locales los que han puesto a disposición, primero de la Gerencia de Atención Primaria del INSALUD y posteriormente ya de la Junta de Extremadura, el terreno necesario para la construcción de dicho Centro. Menos mal a los que están aquí y en Mérida, porque si no, en ambos casos seguiríamos esperando su construcción. Tanto del Instituto como del Centro de Salud, como seguiríamos esperando la iluminación de la Ronda Sur o siguen esperando en Plasencia la Autovía de la Plata.