Una gala de premios cinematográficos sin guión y sin estrellas no es una gala. Este es el riesgo al que se enfrentan los organizadores de los Globos de Oro, cuya ceremonia 13 de enero) pende de un hilo. Y es que si ya era problemático plantearse la gala sin guionistas que la nutran de chistes y contenido, el sindicato de actores anunció el viernes por la noche (hora estadounidense) que "parece haber un acuerdo unánime" para que los candidatos a los premios en las diferentes categorías de interpretación no acudan a la ceremonia en solidaridad con la huelga que los escritores empezaron el pasado 5 de noviembre.

A través de un comunicado, el sindicato de actores de cine y televisión anunció que, tras efectuar una encuesta entre sus afiliados, la postura unánime es que no cruzarán los piquetes que los guionistas han anunciado que organizarán en la ceremonia. Un total de 72 actores se hallan entre los candidatos a los Globos de Oro, sin contar con los que entregan premios y los que acuden para aportar glamur y prestigio a la gala.

Los Globos de Oro son los galardones de cine y de televisión otorgados por la prensa extranjera acreditada en Hollywood, y son considerados los premios más prestigiosos tras los Oscar. La transmisión de la ceremonia de entrega, que corresponde a la NBC, genera millones de dólares, por lo que la decisión de los actores acarrea el riesgo de suspensión, lo que supondría graves consecuencias económicas.

Los más de 10.000 guionistas afiliados en el sindicato llevan en huelga dos meses para reclamar un aumento de los ingresos por la venta de series de televisión en DVD y por su emisión en internet, dos sectores del negocio de Hollywood que suponen grandes beneficios para los estudios. Como resultado, la producción de series se ha detenido.