Trece años después de arrasar con ´Titanic´, James Cameron vuelve a estar el mejor posicionado en la parrilla de salida de los Oscar con ´Avatar´. La competencia será feroz, no tanto por la calidad de algunos filmes que puedan hacerle sombra, que los hay (´Up in the air´, ´En tierra hostil´, ´Malditos bastardos´), sino porque la nómina de títulos que compiten por el premio a la mejor película se amplía a 10. Así que si ya era complicado que recayera en un mismo filme las dos estatuillas, ahora es casi imposible. ¿Resultará normal que gane ´Avatar´ el Oscar al mejor filme y el del director recaiga por ejemplo en Quentin Tarantino o Jason Reitman? ¿No es ´Avatar´ un proyecto absolutamente personal de Cameron, que ha invertido una década entera en desarrollarlo? Al menos, todos los realizadores nominados tienen ahora su cinta entre las candidatas a mejor película.

Han quedado fuera de los premios más cotizados filmes como ´Invictus´ y ´Shutter Island´, y, entre las películas de habla no inglesa, ´El secreto de sus ojos´ tendrá una dura competencia con ´La cinta blanca´ de Michael Haneke, considerada la mejor película europea del año. La pugna más dura puede darse en los premios de interpretación. Ahí vuelve a estar Penélope Cruz, en la categoría de actriz secundaria, lidiando con la excelente Vera Farmiga de ´Up in the air´; o Sandra Bullock, como mejor actriz por ´The blind side´. Curiosamente, el verdadero protagonista del filme, Quinton Aaron, no está nominado. Sí lo está la protagonista, de ´Precious´, Gabourey Sibide, destinada/condenada a arrasar en todas las quinielas. En cuanto a los actores, yo apostaría por Jeremy Renner, el artificiero loco de ´En tierra hostil´, aunque Morgan Freeman haciendo de Nelson Mandela es demasiado contrincante.