En septiembre de 2008, Ana Torroja comenzó a preparar su quinto álbum. El grave accidente que sufrió un mes después "dio la vuelta por completo al concepto de aquel disco", reveló ayer la cantante en una entrevista ante la publicación, la próxima semana, de Sonrisa .

"El accidente me hizo valorar mucho más todo", cuenta Torroja, y ello se ha traducido en un nuevo disco con unas canciones "más vitales, con más fuerza, me presento pisando fuerte", dice.

Torroja se desmarca del contexto actual de crisis económica y le pone color a una "vida que cada vez parece más gris y de capa caída". "Hay que sonreir, aunque sólo sea un segundo", opina la cantante. Después de treinta años en la música, Torroja sigue arriesgando y probando, "aunque lo anterior funcionase". El primer sencillo (Sonrisa ), muestra a una Ana Torroja más firme y rockera en su forma de cantar. A partir de ahí se inicia un crescendo que se detiene a la mitad, con Soy , "una canción para reflexionar", y después se retoma esa energía, "que se halla incluso en las baladas".