LUGAR DE NACIMIENTO PINGTUNG, TAIWAN

EDAD 51 AÑOS

PROFESION DIRECTOR

PELICULAS MAS DESTACADAS ´HULK´, CABALGANDO CON EL DIABLO´, ´TIGRE Y DRAGON´, ´LA TORMENTA DE HIELO´, ´SENTIDO Y SENSIBILIDAD´,

´EL BANQUETE DE BODA´

Amable, humilde, tímido, amante de la familia, la pesca y el tai chi, el taiwanés Ang Lee se ha convertido en uno de los cineastas más sutiles por su habilidad a la hora de contar historias de amor y tragedias al más puro estilo clásico.

Lee estrena el viernes en España Brokeback mountain , basada en un relato de Annie Proulx, publicado en 1997 en la revista New Yorker . Es una transgresora historia de amor entre dos vaqueros que se conocen trabajando como pastores de ovejas. Su relación se enmarca en Wyoming, con el espectacular fondo de los interminables cielos y las majestuosas montañas del western, el género más viril de todos los que componen la cultura americana.

Jake Gyllenhaal y Heath Ledger protagonizan una cinta que se convirtió en sus primeras semanas en EEUU en un fenómeno cultural, ensalzado y condenado por adentrarse en un nuevo territorio a la hora de representar la homosexualidad. Hoy, además, se presenta como firme candidata a llevarse alguno Globo de Oro, antesala de los Oscar.

--¿Pretendía realizar una declaración social con la película?

--Sólo en la vida se pueden hacer declaraciones sociales. En el cine uno tiene que optar por el drama, la sinceridad y el espíritu de las cosas. La idea de hacer una historia de amor entre rancheros, en una versión realista del Oeste, puede parecer extraña para muchos, pero espero que ésta destile la idea de romance como algo conmovedor y universal.

--¿Qué sabía de la cultura del Oeste americano antes de esta película?

--Mi conocimiento, como el de la mayoría de la gente fuera de este país, era a través del cine y de la literatura del género.

--¿Quiénes fueron sus guías?

--La autora del relato, Annie Proulx, con la que pasé muchos días recorriendo Wyoming. Ella me enseñó lo que era realmente importante, el paisaje, los pueblos, los bares, me mostró fotos de la época. Todo eso me sirvió de herramienta. Pero lo más difícil fue reflejar esa cultura.

--Cultura distinta a la suya.

--No crea. De hecho, la cultura china y taiwanesa, a las que pertenezco, son parecidas, en el sentido en que tenemos dificultad a la hora de expresarnos verbalmente, pero hallamos la forma de hacerlo a través del drama, de la pintura y de la poesía. El western es así, una cultura muy reprimida.

--La escena sexual entre los protagonistas es lo más polémico del filme. ¿Cómo la realizó?

--Para empezar, yo soy una persona muy tímida y pensé que lo mejor era no hablar demasiado de ella ni hacer ensayos. Tanto Jake como Heath son actores profesionales. Pasamos mucho tiempo hablando de sus personajes, ensayando e improvisando otras escenas, como la forma de andar y de posar de los vaqueros, el lenguaje de sus cuerpos, porque en ello recae el peso de su relación, en su forma de comunicarse. Estudiamos su psicología en profundidad y las relaciones paralelas entre los protagonistas.

--No es la primera vez que explora el tema de la homosexualidad. Lo hizo en El banquete de bodas.

--Sí, fue la primera vez que se vio en el cine chino a dos hombres besarse en una película. Cuando la estrené, sentí cómo se les cortaba la respiración a unas 800 personas a la vez. Fue una sensación extraña.

--¿Cree que ayudará a rebajar ese clima hostil que se respira contra el matrimonio gay?

--No la hice por razones políticas, sino porque se trataba de una maravillosa historia de amor. Un amor imposible entre dos hombres, una imagen poco reflejada en Hollywood. Puede que demos la impresión de ser unos radicales (risas) pero en el fondo somos todos unos burgueses. Lo que nos mueve es hacer buenas películas, que tengan éxito y nos permitan seguir trabajando.