Angela Vallvey (Ciudad Real, 1964) mira a través de La ciudad del diablo los días previos a la muerte de Franco con los ojos de un niño de diez años, los que ella tenía cuando Carlos Arias Navarro anunció que el "Caudillo, por la gracia de Dios", había muerto. En esas fechas de incertidumbre, en un pequeño pueblo manchego, San Esteban, a un tiro de Toledo, la ciudad imperial y símbolo franquista de la guerra civil, una mujer aparece muerta a cuchilladas.

Un cura imbuido del espíritu aperturista del Concilio Vaticano II y un niño emularán a Sherlock Holmes y Watson para descubrir la identidad del asesino. A partir de esta trama, Vallvey, Premio Nadal en el 2002 por Los estados carenciales , despliega un fresco de época y personajes cuyas vidas están marcas por un régimen salido de una guerra.

La escritora, que estuvo esta semana en Cáceres y Badajoz para presentar su novela, no tiene recuerdos directos de la guerra civil. "Sólo alguna mención, pero en mi casa era como si no hubiera existido". Tampoco del día de la muerte de Franco. "Recuerdo que se suspendieron las clases y que se cargaron la programación de la tele; pero no fui consciente de la situación política o de que aquella muerte era importante".

Lejos de la mirada del adulto, Vallvey escoge el punto de vista de los niños para narrar su novela "porque son un microscopio para mirar el momento con detenimiento y sin prejuicios".

Adentrándose en la época, muestra una "España gris", en la que cobra relevancia su intrahistoria, "la mentalidad de la gente". ¿Qué gente? Curas integristas, luchadores en el conflicto civil que esconden las atrocidades que cometieron, funcionarios liberales... A través de ellos y de informaciones del momento, Vallvey fotografía un instante histórico que es difícil reproducir si no se ha vivido. Sin embargo, cree válidas reconstrucciones históricas como las de Robert Graves o Marguerite Yourcenar sobre Roma, "porque los corazones de los seres humanos responden a los mismos sentimientos; claro que hay que tener talento para darles vida".