Alfredo Alcón vuelve a España para protagonizar el Rey Lear de William Shakespeare, uno de los grandes textos del repertorio que siguen vivos, porque, según el actor argentino, "todos somos Lear, o ¿quién no tiene oscuramente la necesidad de reunir a sus seres queridos para que le digan cómo le quieren?"

Flanqueado por la dirección escénica de Gerardo Vera y la adaptación del dramaturgo Juan Mayorga, Alcón protagoniza un esperado montaje del Centro Dramático Nacional, que se estrena el 14 de febrero en el Teatro Valle Inclán con un amplísimo elenco de actores, desde Cristina Marcos a Miryam Gallego.

"Venía estudiando esta obra desde hace tres años con el proyecto de poder hacerla algún día. No pude hacerla en el Teatro San Martín de Buenos Aires y cuando ya pensé que me tenía que olvidar, y cuando menos lo imaginaba, suena el teléfono. Era Gerardo Vera, con quien trabajé en una serie, hace muchos años", explica con su profunda voz el veterano actor, que la última vez que pasó por España fue en 2002, con Edipo XXI y Lluís Pasqual.

Así, terminó el 25 de noviembre la temporada de La muerte de un viajante en la capital argentina, el 27 llegó a Madrid y el 1 de diciembre ensayaba uno de los grandes textos del repertorio.

En este sentido, afirma: "Los poetas escriben con mirada de eternidad. El Rey Lear o Hamlet están vivos. Es la sensación que te producen cuando los lees. Es como meter los dedos en el enchufe, recibes una carga de vitalidad impresionante. El Rey Lear es como meterte en el mar; sabes que no vas a llegar nunca a atravesarlo. Pero es que el mar no está para eso, está para que te des cuenta de que hay distancias que no son las de tu nariz".

Finalmente, a su juicio, "estos grandes textos son ejercicios de humillación, gozosos. Si uno cree que va a llegar es tonto. Lo que te hace crecer como espectador o como actor es tender hacia esa dimensión".