Los pozos han impregnado el imaginario ibérico de leyendas de toda índole. Desde las más inocentes que los imbuían del poder de conceder deseos hasta las que insinuaban que en ellos habitaba el ángel caído. Consciente de su torrente temático, Care Santos (Mataró, 1970) ha decidido construir sobre ellos El dueño las sombras (Ediciones B), novela juvenil que supone su debut en el género de terror.

Ambientada en el Pirineo aragonés, la novela bebe de su pasión por el género de terror, un trabajo etnográfico sobre las leyendas del folclore ibérico y algunos de sus recuerdos de infancia. "Cuando era pequeña mi madre me colgaba a las muñecas de la pared con un lazo. A mí me daba pánico porque parecía que estuvieran ahorcadas".