El extremeño Reyes Abades, que falleció el jueves en Torrejón de Ardoz (Madrid) de forma repentina, no ganó anoche el décimo Goya de su carrera a los mejores efectos especiales, pero ha sido homenajeado por el cine español con una ovación de varios minutos.

Reyes Abades estaba doblemente nominado en esta 32 edición de los premios, que ha sido dados a conocer esta noche en Madrid, en la tradicional gala de la Academia de Cine.

Por "Oro", un película de Agustín Díaz Yáñez basada en un relato de Agustín Díaz Yáñez; y por "Zona hostil", de Adolfo Martínez, pero se lo ha llevado "Handia", dirigida por Jon Garaño, Aitor Arregi.

Antes de darse a conocer el fallo, el actor Jorge Sanz ha pedido una ovación para Reyes Abades y el auditorio se ha puesto en pie para aplaudirle durante varios minutos.

Reyes Abades, nacido en Castilblanco (Badajoz) en 1949, falleció la noche del jueves a causa de un infarto y ha sido enterrado hoy en Torrejón de Ardoz (Madrid).

Su primer Goya lo ganó con "Ay Carmela" (1990). Repitió con "Beltenebros" un año después y siguió sumando en "Días Contados", "El día de la bestia", "Tierra", "Buñuel y la mesa del rey Salomón", "Lobo", "El laberinto del fauno" y "Balada triste de trompeta".

Considerado un mago de los efectos especiales, durante 50 años de oficio ha tenido la oportunidad de trabajar con todos los grandes, desde Buñuel a Almodóvar, de Saura a Guillermo del Toro, y en su filmografía figuran 274 créditos.