Dos viejos conocidos del Festival de Cannes, los hermanos Coen, volvieron a la competición oficial con The Ladykillers , una divertida e irónica comedia sobre la importancia del azar en nuestra vida.

La otra cinta que se presentó ayer con el objetivo de ganar la Palma de Oro es la tailandesa Tropical malady , de Apichatpong Weerasethakul, una monótona historia sobre dos homosexuales y su misteriosa relación con la selva.

La película de Joel y Ethan Coen está protagonizada con su eficacia tradicional por Tom Hanks. El argumento presenta cinco hombres, que simulan ser músicos, y que pretenden desvalijar un banco a través de un túnel que cavarán desde la casa de una ingenua anciana que les alquila una habitación supuestamente para que ensayen.

El azar, sin embargo, irá modificando sus planes a medida que los problemas se presentan y multiplican.

Tras la proyección, Joel Coen señaló que hacía tiempo que querían trabajar con Tom Hanks, sin saber exactamente en qué proyecto. El largometraje es una nueva versión de El quinteto de la muerte , una comedia realizada por Alexander Mackendrick en 1955 con Alec Guiness, Peter Sellers y Herbert Lom.

La película tailandesa narra la historia de un soldado y de su amante, un campesino de la selva, cuyas vidas transcurren de manera dulce y agradable. Para su director "el filme es un canto de amor y de oscuridad".