Las imprentas extremeñas han editado más de 5.000 títulos de libros desde el 2002, año en que se creó la Biblioteca de Extremadura, con lo que en lo que va del siglo XXI se ha impreso en la región más obras que en el período comprendido entre los siglos XVI y XIX, según destacó ayer la consejera Leonor Flores.

La titular de Cultura y Turismo inauguró en Badajoz un curso de verano de la Universidad de Extremadura que, bajo el título Extremadura, 1983-2008. Letras y Libros , analizará hasta el próximo viernes la evolución de evolución de los libros en la región y su futuro con la incorporación de las nuevas tecnologías.

Según Flores, este seminario permitirá estudiar y analizar la literatura en Extremadura y la obra de escritores extremeños.

Para Justo Vila, director del curso y de la Biblioteca de Extremadura, que acoge el seminario, actualmente se está viviendo un revolución digital tan importante como fueron en su tiempo la revolución neolítica o industrial.

"Hace diez años la idea de un biblioteca digital rozaba casi la ciencia ficción y en pleno siglo XXI esta misma biblioteca es ya un híbrido entre la biblioteca tradicional y la electrónica", resaltó Vila. Durante el curso, según su director, se romperán más de dos tópicos en torno a Extremadura y los extremeñas. "En contra de todos los tópicos, Extremadura es tierra de libros, de escritores y de gente libre", recalcó y, en este sentido, habló de Juan de Zúñiga, maestre sin corona de la Orden de Alcántara, que fundó la academia literaria de Zalamea de la Serena donde Antonio Lebrija redactó a finales del siglo XV la primera gramática de la lengua castellana.

También se podrá comprobar que Extremadura es tierra de escritores, no sólo de poetas, sino de narradores, dramaturgos y ensayistas, que viven y trabajan en la región.