Lo que otros periodistas no habían conseguido lo logró David Frost, en cuyo currículo figuran entrevistados como Arafat o Tony Blair. De ahí que Nixon, ya retirado tras el escándalo del Watergate, aceptara mantener con él una serie de encuentros televisados, en lo que suponía que sería una rehabilitación de su legado. Pero no ocurrió exactamente así. ´El desafío: Nixon contra Frost´ (hoy el Aula de Caja Extremadura en Cáceres, reconstruye el proceso de preparación de las entrevistas y las citas que mantuvieron ante las cámaras, que lograron récords de audiencia.