Ernesto Alterio, encarna a Edipo, el personaje principal de la obra de Sófocles, Edipo Rey , que se estrena esta noche (23.00 horas) dentro de la 54 edición del Festival de Mérida y que se podrá ver hasta el domingo y del 19 al 24 de este mes. Más concentrado que de costumbre, este actor nacida en Argentina, reconoce que su trabajo supone "un ejercicio que requiere mucha preparación dada la exigencia de mi personaje".
--¿Cómo encara este papel con un registro habitual en usted?
--La verdad es que nunca había hecho una tragedia, y era algo que tenía muchas ganas. Me atreví a ello por todos los ingredientes que acompañaban al montaje: el director, Jorge Lavelli, un trabajo interesante, Mérida, el elenco. Estoy encantado de vivir tal experiencia.
--¿Qué le aporta con su trabajo, como personaje principal, al resto del equipo de actores?
--Colaboración. No hay otra manera de hacer teatro que la de un trabajo en equipo. Hay que unir las fuerzas para contar todos la misma historia. Cada personaje, además, no solo se arma con el trabajo de uno mismo, si no que, también, de cómo lo perciben los demás.
--¿El director exige mucho o da libertad a los actores?
--El director es extremadamente exigente, de los que más con los que he trabajado. Siempre he sentido que detrás de ese nivel, hay un saber muy importante, por lo que he tratado de responder esa exigencia. No la he padecido sino que la he agradecido, también porque el texto es muy exigente.
--Exigencia en cuanto a la interpretación, en la puesta en escena... ¿en qué sentido?
--A todos los niveles, en la interpretación y no solo eso, también en cuanto al código. Desde el comienzo se estableció que este material no tiene nada que ver con lo cotidiano y, para abarcar la dimensión de este tema, había que entrar en zonas desconocidas. A mí, esto me daba miedo y por ello siempre está bien que haya un director que te compulse a meterte en lo desconocido.
--Es la catorce ocasión que se representa Edipo Rey en el Teatro Romano de Mérida ...
--¡¿Catorce veces se ha hecho ya aquí?! ¡Joder! qué pesados (Risas).
--Sí, es una obra muy conocida aquí... ¿qué puede aportar de nuevo en su interpretación?
--No más que mi autenticidad, que no es poco. Trataré de ser genuino en cuanto a ser sincero y recorrer yo con mis carnes y mi ser el camino de Edipo. Y bueno, tomar a la gente de la mano y que lo recorra conmigo.
--¿Se cogerá a su mano el público del teatro tomano?
--Yo espero que la gente se interese y se enganche. Además, esta obra es un conjunto de ingredientes muy atractivos, muy mal lo tenemos que hacer como para que no interese, porque la obra es de una arquitectura dramática perfecta. De todas maneras esto no se sabe hasta que pasa.
