Extendida la alfombra roja y preparados los presentadores, todo está a punto para que la 79 edición de los Oscar sea el domingo una vez más la gala televisada más vista del planeta, a lo que contribuye este año el aluvión de candidatos extranjeros.

"Alguien me recordó que este año los Oscar tienen una gran diversidad y que no olvidara que tenemos una audiencia internacional. Lo sé, cómo olvidar eso", reconoció ante la prensa la productora de la gala, Laura Ziskin, quien puso como ejemplo la candidatura de la española Penélope Cruz como mejor actriz.

Cruz es una de las diecinueve aspirantes con nombre hispano en esta edición, en la que dos cortos españoles y tres largos dirigidos por mexicanos -Guillermo del Toro, Alejandro González Iñárritu y Alfonso Cuarón- se conjuraron para batir todos los récords latinos.

A ellos se suman actores, directores y técnicos británicos, australianos, japoneses, húngaros y franceses, entre otros países, aparte del aire danés, alemán, argelino y canadiense en la categoría de película en lengua extranjera, donde también compite la hispano-mexicana El laberinto del fauno , de Del Toro.

"Se les proporcionará a los presentadores transcripciones fonéticas de los nombres de todos los candidatos. Haremos absolutamente todos los esfuerzos a nuestro alcance para que los nombres de todo el mundo se pronuncien correctamente, sean del país del que sean", prometió el director de la gala, Lewis J. Horvitz.

Horvitz, que dirigirá la transmisión de la ceremonia por décima vez consecutiva, integra un dúo de lujo con Ziskin, productora de películas como la saga de Spiderman y que organiza la velada por segunda vez tras la de 2002, que le valió un premio Emmy.

Ambos, junto a la novel maestra de ceremonias Ellen DeGeneres, tienen la responsabilidad de que las casi cuatro horas previstas de emisión que comenzarán a las 17.00 horas en Los Angeles (01.00 GMT del lunes) transcurran de modo ameno.

Para ello se han sacado de la manga una innovación, la Cámara de agradecimientos , situada tras el escenario para que los ganadores, Oscar en mano, se extiendan tanto como quieran en sus discursos de gratitud y los citados en ellos puedan verlo en internet, en vez de en directo sobre el escenario, lo que haría eterna la ceremonia.

Detalle La Academia de Hollywood regaló a los 177 candidatos una grabadora en miniatura que dura 45 segundos, tiempo aconsejado para el discurso, a fin de que fuesen ensayando.

De camino al teatro Kodak, los invitados desfilarán por la famosa alfombra roja, cuyos 152 metros y medio de recorrido peinarán catorce cámaras de alta definición, informó la Academia.

Otras 350 personas se encargarán de coordinar y manejar veinte cámaras centradas en el escenario y los 3.300 asientos del teatro. A fin de evitar que se vea una butaca vacía si un invitado abandona la sala, este año por vez primera un pinchadiscos amenizará la espera en las pausas publicitarias, y para suplir a los que aun así salgan habrá 250 personas empleadas como "rellena-asientos".