Mientras hay quien vuelve a casa por Navidad, los niños artistas se marchan de gira. Respetando, eso sí, las fiestas de guardar. El martes pasado, los componentes del grupo infantil 3+2 dejaron los libros y la cartera para iniciar una minitournée de seis fechas.

Jaume Funes, adjunto del Síndic de Greuges per a la Inf ncia, se pregunta: "¿Es lícito someterles a esta presión mediática que viven al convertirse en ídolos masivos?". Funes, licenciado en Psicología, explica que, "por encima del negocio debería estar una mínima consideración del interés del niño, antes de colocarlo en determinadas vorágines de audiencia y consumo". De todas modos, admite: "Lo importante es que tengan cerca a adultos que les ayuden a relativizar, pues el éxito no suele ser eterno".

No parece ser el problema de Melody, la niña de Los Gorilas, que a los 14 años afronta una nueva etapa con el disco Melodía. "Cualquiera puede perder un trabajo buenísimo y quedarse sin nada", dice la cantante. "No está la vida para pensar en lo negativo, porque las cosas malas llegan solas, pero las buenas hay que buscarlas. Si no, no llegan".

A diferencia de Melody, que nunca acudió a un casting televisivo, la novísima generación infantil no esconde su brillo catódico. Yaiza Esteve está tan identificada con el personaje que encarna en Mis adorables vecinos que firma sus discos como Sheila, su nombre de ficción. Y, creado como factoría musical, el programa Eurojunior ha sido la cuna artística del éxito de María Isabel y del grupo 3+2. Irurne, una de sus componentes, asegura: "No he bajado en notas, y eso que ya estoy en segundo de ESO. Si algo le pido al año que viene es que todo me vaya igual de bien y que podamos seguir con el grupo".

Eva Cebrián, directora de su oficina de management, explica que "a ellos lo que más les gusta es estar en un escenario. Muchos artistas empezaron de niños, no entiendo por qué con María Isabel surgen tantas críticas". Y añade: "Trabajamos en equipo con los padres sin descuidar sus estudios. No hacemos giras largas y está todo medido. El espot de Colacao lo hicieron un sábado en el Tibidabo. No están precisamente cosiendo balones".

Con 26 años de trayectoria en la industria discográfica, Jordi Porcar ha visto crecer y diluirse a todo tipo de ídolos, entre ellos Enrique y Ana. Ahora justifica el éxito de Sheila y otros retoños. "Antes, cada Navidad surgía un grupo. Llevábamos años de sequía y ese mercado lo acaparaban artistas adolescentes o mayores. Está bien que existan cantantes en los que se puedan ver reflejados los niños". Precisamente, ése es uno de los temas que más controversia levanta. "El drama es que los niños vean este tipo de modelos superficiales, asegura Funes.