Los estudios de animación Disney-Pixar hicieron historia en la gala de inauguración del pasado Festival de Cannes. Primero lograron que unos 2.500 vips, ellos con esmoquin y ellas con escote palabra de honor, se pusieran unas horteras gafas de plástico para contemplar, en la catedral del cine de autor, una película de dibujos animados, la primera que Pixar produce en 3-D. Y luego toda esa gente devolvió las gafas empapadas en lágrimas, de emoción, de felicidad. Pero, ¿no se supone que Up , que hoy se estrena en España, es una película para niños?

El caso es que lo es, pero del mismo modo que lo eran Wall.e , llena de citas a Chaplin y a Kubrick, y Ratatouille , llena de ratas: a su manera. Up arranca en blanco y negro, tiene secuencias prácticamente mudas y está protagonizada por el tipo de personaje que, al parecer, tiene efectos nefastos en taquilla: un anciano, concretamente viudo y de aspecto parecido al de Spencer Tracy en Adivina quién viene esta noche , aunque su voz original es la de Ed Asner, más conocido como Lou Grant --Luis Varela, intérprete de Camera Café, lo ha doblado al castellano--. Carl, que así se llama, ha convertido su hogar en una tumba, y un día decide atar miles de globos a la chimenea y echar a volar. Bonita metáfora sobre la muerte.

Que ningún padre se asuste, porque por Up también transitan una jauría de hilarantes perros parlantes, un pájaro gigante con alma de mimo, un villano que lleva la L de loser tatuada en la frente y, sobre todo, un joven y regordete boy scout que acompañará a Carl en su aventura surreal a la busca del mundo perdido.