Aunque las letras francesas han perdido por el camino gran parte de su viejo peso cultural, los libros de Patrick Modiano, uno de los grandes narradores europeos, son una hermosa excepción. Mientras en Francia, la aparición de una nueva novela del sexagenario autor sigue siendo todo un acontecimiento, en España la suerte y recepción de sus ediciones ha sido un tanto errática.

La buena noticia es que con la reciente publicación de Un pedigrí , su penúltima novela, Anagrama se propone recuperar parte de la obra del más amargo cronista de la ocupación y la posguerra francesa. El sello ha comprado los derechos de Dans le café de la jeunesse perdue , que apareció en octubre en Francia y que ha sido considerada por la revista Lire como la mejor novela francesa del año, y está dispuesto a recuperar algunas de sus viejas obras empezando por Calle de las tiendas oscuras , que ganó el Goncourt en 1978 y que nunca fue editada en España.

Desde su debut, con La place de l´Etoile , aparecido en 1968, con título ambivalente (alude a la conocida plaza de París, pero también al lugar de la estrella, es decir, el corazón, sobre el que los alemanes obligaban a coser el distintivo judío durante la ocupación), Modiano nacido en Boulogne-Billancourt en 1945, en lo que entonces era la periferia parisina, ha utilizado su propia vida para filtrar a través de la ficción la mayor parte de su obra.

Pero solo en Un pedigrí en el que vuelve a brillar su estilo directo y sin adornos --que en ocasiones recuerda a los mejores textos de Duras-- relata sin tapujos sus desdichadas infancia y adolescencia, liberándose de las máscaras.